Durante septiembre, cuando los precios del petróleo venían registrando ajustes y en el caso del West Texas Intermediate (WTI) ajustaba a niveles de 44.55 dólares, la posibilidad e insistencia de los miembros de la OPEP y el apoyo, al menos de palabra, de Rusia por alcanzar un acuerdo para congelar y/o reducir la producción diaria de crudo generaron que en las últimas 4.5 semanas, los costos hayan subido más de 16% hasta niveles cercanos a los 51.8 dólares y de manera reciente haya bajado ligeramente de 50 dólares.

 

Todas las voces ligadas a los productores de crudo anhelan alcanzar un acuerdo, pero también están conscientes de que necesitan mayores ingresos ante una desaceleración o recesión que viven sus economías.

 

Los productores de crudo de la OPEP y Rusia se caracterizan por fallar en los convenios. Son poco confiables y es una de las grandes dudas para este 30 de noviembre en que se reunirán en Viena y estarán anunciando, en teoría, “un gran acuerdo”.

 

La producción diaria de crudo en la OPEP alcanza los 34.5 millones de barriles. La participación de crudo entre los miembros ubica en primer lugar a Arabia Saudita con 32%, Irak en segundo lugar con 13%, Irán en tercer lugar con 10%, Kuwait en cuarto con 9.0% y Emiratos Árabes Unidos con 8% en quinto lugar. El resto lo compone Venezuela con 7%, Angola con 6%, Nigeria con 5% y otros ya con menor injerencia.

 

Arabia Saudita, por un lado, mantiene diferencias políticas, sociales, religiosas y económicas con Irán, que ha sido claro de que no estará participando de manera activa en el acuerdo hasta no regresar a su injerencia previa a la sanción impuesta en 17% de la producción total. A la vez, trae una lucha también con Estados Unidos por la participación global del mercado de crudo.

 

El fin de semana pasado conocimos que Irak aumentó su producción diaria de crudo de marzo a septiembre en 8.0% alcanzando los 4.8 millones de barriles por día, de los cuales 81% lo exporta. Algunos comentarios manifiestan que Irak buscaría mantener su aumento en la producción diaria de crudo y sería difícil participar en el convenio del recorte de producción.

 

Irán, por su parte, ha dejado en claro que no participaría en un recorte de producción, pero hasta donde se comentaba quedaría exento de este recorte junto con Nigeria, que han visto interrumpidos sus niveles de producción.

 

En Estados Unidos, los pozos petroleros se han ido reactivando conforme los precios del petróleo suben. Actualmente ya se tienen 443 pozos activos cuando en mayo pasado llegaron a representar sólo poco más de 300. En la medida de que el costo del petróleo siga subiendo, el potencial de alza de más pozos estará vigente. Hoy, dicho promedio se ubica en 42.55 dólares, cuando en mayo llegaron a situarse debajo de los 40 dólares. La producción diaria de crudo de este país alcanza los 9.6 millones.

 

Así, al ver la condición de los mercados, observamos que al WTI le está costando por ahora superar los 52 dólares, mientras que al Brent, los 53.5 dólares. En la medida de que no lo superen en estos días, el riesgo de una baja entre 6 y 10% en los precios estará siendo cada vez más probable.

 

La moneda está en el aire, pero también después de un buen rally y en donde las condiciones de la economía mundial reflejan un crecimiento moderado, la posibilidad de una sobreoferta está a la vista, y seguramente preocupará a más de un miembro de la OPEP urgido de mayores recursos como Venezuela, por ejemplo. Hemos visto en octubre alguna recuperación en la manufactura en Europa y en septiembre en China, Estados Unidos y Japón, pero no se aprecia lo suficientemente sólida como para una mayor demanda de crudo.