KIEV. El presidente interino de Ucrania, Alexandr Turchínov, ordenó la reanudación de la operación antiterrorista en el este del país, donde las milicias prorrusas se han sublevado contra Kiev y se niegan a cumplir los acuerdos de Ginebra.

 

“Exijo a las fuerzas de seguridad la reanudación y puesta en marcha de acciones antiterroristas eficaces dirigidas a proteger de los terroristas a los ciudadanos ucranianos que viven en el este de Ucrania”, aseguró Turchínov, citado por las agencias locales.

 

La fase más activa de la operación antiterrorista había estado en suspenso desde la pasada semana debido a la Pascua ortodoxa, pero los insurgentes ya dieron por terminada la tregua el domingo tras un tiroteo en la localidad de Slaviansk, baluarte de la sublevación.

 

“Hoy en Slaviansk se hallaron los cuerpos de dos personas salvajemente torturadas. Uno de ellos fue identificado como el desaparecido diputado de la asamblea municipal de Górlovka, Vladímir Ribak, que había sido secuestrado la víspera por los terroristas”, denunció Turchínov.

 

Ribak pertenecía al partido Batkivschina (Patria), del que también es miembro Turchínov y cuyo líder es la candidata a la Presidencia, Yulia Timoshenko.

 

“Los terroristas han secuestrado prácticamente toda la región de Donetsk y se han pasado de la raya al torturar y asesinar a patriotas de Ucrania”, señaló.

 

Turchínov aseguró que, de esa forma, “han lanzado de manera impertinente un desafío no sólo a nuestro país, sino a toda la comunidad internacional cuando de manera demostrativa despreciaron las decisiones que fueron adoptadas en Ginebra”.

 

“Estos crímenes se cometen bajo el pleno apoyo y connivencia de la Federación Rusa”, denunció.

 

Turchínov acusó a las milicias prorrusas de incumplir los acuerdos de Ginebra al hacerse con el control de un nuevo edificio oficial, la comisaría de la localidad de Kramatorsk, donde habrían secuestrado al jefe de la policía local.

 

Además, el Ministerio de Defensa ucraniano informó que un avión recibió ayer algunos tiros cuando sobrevolaba la ciudad de Slaviansk, uno de los bastiones separatistas de la convulsionada provincia de Donetsk. Pese a los disparos, el avión logró volver a su base en Kiev sin ningún herido.

 

En tanto, el levantamiento separatista en algunas de las principales ciudades del este del país continuó creciendo y profundizándose. En la ciudad de Lugansk, uno de los centros industriales de Ucrania, la asamblea separatista convocó a un referendo para decidir sobre la independencia de la región y el ingreso a la Federación Rusia, la misma iniciativa que terminó el mes pasado con la anexión rusa de la península de Crimea.

 

El referendo, que se sumará a los convocados por grupos pro rusos en las regiones de Odesa y Donetsk, se celebrará en dos etapas.

 

En la primera, el 11 de mayo, se decidirá si Lugansk se declara región autónoma de Ucrania y en la segunda, prevista para el 18 del mismo mes, si opta por la independencia o la anexión a Rusia, según explicó la agencia de noticias rusa Interfax.

 

 

‘Hay que parar de hablar y empezar a actuar’

 

KIEV. De visita en Ucrania, el vicepresidente de Estados Unidos, amenazó a Rusia con el aislamiento internacional si no cumple los acuerdos de Ginebra y no persuade a las milicias prorrusas del Este de Ucrania a que depongan las armas.

 

“Es hora de que Rusia deje de hablar y empiece a actuar. Se acaba el tiempo para lograr avances”, afirmó Biden durante una comparecencia de prensa en Kiev tras reunirse a puerta cerrada con el primer ministro ucraniano, Arseni Yatseniuk.

Biden llamó a Moscú a persuadir a los “separatistas prorrusos”, como él los calificó, a que entreguen las armas y desalojen los edificios públicos que mantienen ocupados en varias ciudades del sureste de Ucrania, como establece el documento suscrito en Ginebra.

“No es algo tan difícil de hacer. No permitiremos que esto se convierta en un proceso interminable. Ucrania es y seguirá siendo un país unido. EEUU apoya a una Ucrania fuerte y unida”, dijo.

Además, llamó a los rusos a cooperar en el este de Ucrania con la misión de la OSCE, la encargada de supervisar el cumplimiento de los acuerdos alcanzados el pasado 17 de abril en Ginebra por Ucrania, Rusia, Estados Unidos y la Unión Europea.

“Ningún país debe amenazar a otro emplazando sus tropas en la frontera y de este modo desestabilizar la situación en el país vecino. Queremos que Rusia no apoye a gente enmascarada y con uniforme que se apodera de edificios en el este del país”, señaló.

Y advirtió: “Hemos dejado claro que una mayor conducta provocadora por parte de Rusia conllevará más costes y un mayor aislamiento”.

“Ninguna nación tiene derecho a anexionarse el territorio de otro país y nosotros nunca reconoceremos la ocupación rusa de Crimea. Y el mundo tampoco lo reconocerá”, aseveró en alusión a la península ucraniana de mayoría rusohablante anexionada por Rusia.

Las milicias prorrusas no sólo mantienen el control de varias ciudades en la región minera de Donetsk, sino que ayer añadieron a su lista de trofeos la comisaría de la localidad de Kramatorsk, donde secuestraron al jefe de la policía.

En contraposición, Biden destacó que Ucrania ha “hecho todo” para cumplir con los acuerdos de Ginebra, como la aprobación de una ley de amnistía para aquellos prorrusos que entreguen las armas y desocupen los edificios oficiales.

“EU apoya los esfuerzos diplomáticos para desactivar la tensión”, dijo.

Aunque no llegó a anunciar la ansiada por Kiev ayuda militar, Biden adelantó que Washington suministrará a este país equipos de comunicaciones y de desactivado de explosivos por valor de casi 20 millones de dólares.

Lo que se suma a los 8 millones de “ayuda militar no letal” anunciada por la Casa Blanca para las Fuerzas Armadas de Ucrania.

También prometió ayuda urgente para garantizar la seguridad energética de Ucrania e impedir que “un solo país, en particular Rusia, utilice los recursos energéticos como arma política contra Ucrania o Europa”.

Y destacó la importancia de seguir adelante con las reformas, la lucha contra la corrupción y los preparativos para los comicios presidenciales del próximo 25 de mayo, que describió como “las elecciones más importantes de la historia de Ucrania”, a lo que EU dedicará 50 millones de dólares.