Los Acereros de Pittsburgh puede que hayan sufrido más que una derrota el domingo ante los Delfines de Miami; el quarterback Ben Roethlisberger sufrió un desgarre de meniscos en la rodilla izquierda y tuvo que ser intervenido quirúrgicamente, lo cual lo alejará de los emparrillados al menos dos semanas.

 

Big Ben salió lesionado en el segundo cuarto ante Miami, pero regresó más tarde, aunque para confirmarse que estaba lesionado.

 

La noticia es muy dolorosa para Pittsburgh debido a que enfrentan en la Semana siete a los Patriotas de Tom Brady, que por cierto, regresó jugando a un gran nivel y el panorama no es muy halagador para la franquicia de Pensilvania.

 

El equipo hizo una declaración y declaró que no hay un tiempo determinado para el regreso de su pasador, pero esperan que no sea una lesión a largo plazo. Pero ayer ya fue operado y se espera que sean dos semanas las que no tengan a su talismán ofensivo.

 

“Es uno de los jugadores más fuertes de la Liga. Nunca lo descartaría por una lesión. Es un tipo fuera de serie y un jugador increíble”, señaló Tom Brady, quarterback de Patriotas.

 

El suplente de Roethlisberger es Landry Jones y en tres años con Pittsburgh, sólo ha iniciado dos partidos y tuvo tres touchdowns y cuatro intercepciones en 2015.