Rosario nació un 25 de mayo de 1925 en la Ciudad de México pero creció en una hacienda en Comitán, un pequeño poblado de los Altos de Chiapas; con la muerte de sus padres en 1948 y con medios financieros limitados, sintió una urgente necesidad de expresarse; pronto se convirtió en la primer mujer escritora en Chiapas.

 

Posteriormente ingresó a la UNAM y pronto se relacionó con Ernesto Cardenal, Dolores Castro, Jaime Sabines y Agusto Monterroso.

 

Castellanos murió a la temprana edad de 49 años a causa de un desafortunado accidente doméstico.

 

Falleció en Tel Aviv el 7 de agosto de 1974, a consecuencia de una descarga eléctrica provocada por una lámpara cuando acudía a contestar el teléfono al salir de bañarse. Sus restos descansan en la Rotonda de las Personas Ilustres desde el 9 de agosto de 1974.

 

Fue una mujer entregada a la defensa de los derechos de las mujeres, tanto así que es, orgullosamente reconocida como un símbolo del feminismo latinoamericano.

 

El mundo narrativo de Castellanos poseía elementos de la novela costumbrista que se pueden apreciar en sus libros Balún Canán (1957) y Oficio de tinieblas (1962), obras en las que recreó la atmósfera social y religiosa, de Chiapas.

 

Mientras que la dimensión social, la conciencia del mestizaje y en una dimensión personal, la sensación de desamparo que surge tras la pérdida del amor, se puede apreciar en Ciudad Real (1960), Los convidados de agosto (1964) y Álbum de familia (1971).

 

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