Mucha sonrisa, mucho baile, muchos regates, pero pocos resultados en la cancha. Es lo que ha obtenido Querétaro de Ronaldinho, que sí, donde se para llena estadios, que en La Corregidora vuelve loca a la afición; que ya demostró lo bien que baila la Samba en la celebración de un gol, pero lo cierto es que desde la llegada del brasileños el equipo de Ignacio Ambriz ha venido a la baja. Lo dicen los números que dicen que antes de que Dinho se convirtiera en gallo, Querétaro había acumulado 11 puntos producto de tres triunfos, dos empates y tres derrotas y estaba metido de lleno entre los ocho primeros de la tabla en busca de un boleto para la Liguilla por el título.

 

Hoy la realidad queretano dice que poco les ha ayudado la llegada de la estrella brasileña, y es que Gallos marcha hasta la posición 12, cuatro lugares más atrás que antes de la llegada de Ronaldinho, quien apenas ha colaborado para un triunfo en los cinco juegos que ha disputado con Gallos, y a cambio, no ha podido impedir un empate y tres derrotas en fila, pese a los dos millones de dólares que tiene asegurados por año en su estancia en Querétaro.

 

La situación no mejora en el horizonte queretano si se toma en cuenta que hoy recibe la visita del superlíder del torneo: América se mete a La Corregidora, un equipo que fuera de lo visto en la goleada ante Cruz Azul, es el cuadro más constante de la competencia; el más goleador y que ostenta una de las mejores defensivas.

 

Lo peor para Gallos, que la intensión de alinear con un cuadro alternativo para dar descanso a los titulares amarillos se quedó en sólo una idea, porque ayer el timonel Antonio Mohamed anunció que en La Corregidora arrancará prácticamente el 90 por ciento del plantel que venció a monterrey hace ocho días en el Estadio Azteca, y el martes a media semana, cuando las Águilas, también en casa, despacharon al Comunicaciones de Guatemala para calificarse a los cuartos de final de la Concachampions.

 

No es todo, el Turco anunció que por supuesto que no habrá una marca especial para Ronaldinho, a quien le reconoce su estatus de estrella, pero de eso a que preocupe demás a los amarillos hay mucha distancia: “Ronaldinho es un jugador que mueve masas, que tiene un historial muy grande, pero creo que ellos se tienen que preocupar más por nosotros, que nosotros por ellos”.

 

Y es que al final, Mohamed sabe que Querétaro necesita más el triunfo que los emplumados que marchan en la cima y ya están calificados: “Es un partido de futbol como todos, contra un rival muy necesitado, pero con grandes individualidades”.

 

Advertencia amarilla para el Querétaro, que hay que decir, de Ronaldinho, más allá de los reflectores, de los bailecitos y los llenos en los estadios donde se para, la verdad es que deportivamente ha resultado un petardo bastante quemado.