MONTERREY. En los últimos años, la cirugía robótica ha avanzado en México, lo que permite que algunos procedimientos médicos se realicen en menor tiempo y con mínima invasión, afirmaron especialistas del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey.

 

El director de la División de Cirugía del Hospital San José (HSJ) del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), Carlos Rodríguez Montalvo, expresó que los nuevos procedimientos médicos, a través de innovadores sistemas tecnológicos, permiten una importante evolución en la medicina.

 

“La robótica en la medicina no sólo ha renovado la forma de practicar la cirugía, sino que ha renovado la forma de enseñar y aprender la misma”, afirmó.

 

Por su parte, el experto del mismo nosocomio, Ulises Garza Serna, señaló que las claves del éxito en este rubro son la experiencia del cirujano, la colocación de los puertos quirúrgicos en posición correcta y el conocimiento del sistema robotizado.

 

“Para que los avances en esta área no queden rezagados y sigan fructificando en el país, se necesitan más espacios de entrenamiento y capacitación de las nuevas generaciones”, indicó.

 

Añadió que también se requiere más cultura para usar estos nuevos procedimientos médicos y publicaciones, para dar a conocer lo que se está haciendo en México.

 

A su vez, el especialista del mencionado hospital, Luis Fernando García Rodríguez, comentó que a partir de 2009, la cirugía robótica ha aumentado con mayor frecuencia en la ginecología.

 

Refirió desde el año 2006, el HSJ cuenta con el robot Da Vinci, equipo con el que se pueden realizar pequeñas incisiones para introducir instrumentos en miniatura de amplio rango y una cámara tridimensional aumentada de alta resolución del lugar de la operación.

 

Detalló que las especialidades médicas que más utilizan ese procedimiento son las de urología, ginecología, oncología, otorrinolaringología, así como las cirugías digestiva, pediátrica y cardiovascular.

 

“La cirugía robótica son procedimientos que se realizan con asistencia de un sistema, que en este caso es el Da Vinci, que cuenta con cuatro brazos de trabajo que realizan diferentes funciones”, explicó.

 

Subrayó que “el robot obedece en forma intuitiva a los movimientos de un mando que manipula el cirujano, no son autónomos, son dependientes del operador”.

 

Estos instrumentos y cámara, dijo, se introducen por incisiones de nueve y 12 milímetros en el paciente.

 

Abundó que en México, se cuenta con seis robots de este tipo, siendo el Hospital San José, el primer nosocomio en tener este sistema robotizado en 2006.

 

“Entre las ventajas que ofrece el Da Vinci al paciente son una recuperación más rápida, menor sangrado y dolor, e incorporarse más rápido a sus actividades diarias”, indicó.

 

Puntualizó que para el cirujano, significa una mayor comodidad y seguridad al momento de realizar la operación, que se traduce en menor estrés.