En el Estado de México inició un operativo federal en coordinación con autoridades estatales para decomisar y destruir las máquinas tragamonedas prohibidas por la ley, y que su funcionamiento representa un vínculo con el crimen organizado.

 

En la puesta en marcha participan autoridades de la Secretaría de Gobernación, la Policía Federal (PF), y la Procuraduría General de la República (PGR), con el fin de “erradicar” ese tipo de máquinas que representan, según la dependencia, una fuente de corrupción de menores.

 

A través de un comunicado, la Secretaria de Gobernación (Segob) señaló que “las máquinas tragamonedas representan una fuente de corrupción de menores y su uso una adicción que abre la puerta a la delincuencia. La adicción a estos juegos por parte de los menores de edad puede implicar deserción escolar, acompañada de actos de violencia con el propósito de obtener dinero, además de que genera una falsa expectativa de obtener recompensas económicas sin hacer mayor esfuerzo”.

 

Por esa razón es que los operativos para decomisarlas y destruirlas forman parte del programa permanente que se llevará a cabo en todo el país, “toda vez que diversas voces ciudadanas, principalmente padres de familia, han demandado a las autoridades federales y estatales su intervención a fin de proteger a los sectores vulnerables de la población como son los menores de edad y de acotar los espacios a la delincuencia organizada que, en la mayoría de los casos, opera en la instalación y uso de este tipo de máquinas.

 

La puesta en marcha de este operativo de alcance nacional comenzó de forma simultánea en los municipios mexiquenses de Cuautitlán Izcalli, Tecámac y Villa Victoria, donde fueron decomisadas las máquinas instaladas sin la autorización correspondiente en diversos negocios de esas poblaciones.

 

En Cuautitlán Izcalli se aseguraron 62 máquinas y fueron clausurados cuatro establecimientos, cuyo giro era exclusivamente de máquinas tragamonedas. En Tecámac se decomisaron 32 máquinas sin el cierre de algún negocio. Mientras que en Villa Victoria 36 máquinas fueron retiradas y tampoco se registró la inhabilitación de establecimientos.

 

Como parte de los operativos, se presentaron las denuncias ante las autoridades correspondientes por juego ilegal y las máquinas tragamonedas se trasladaron a bodegas ubicadas en la entidad, quedando bajo responsabilidad y resguardo de las autoridades locales hasta su destrucción, señalo la dependencia federal.

 

Según el reporte, tan sólo en el Estado de México se tienen ubicadas alrededor de 20 mil máquinas tragamonedas ilegales, las cuales se localizan en lugares de fácil acceso como farmacias, tiendas de abarrotes, paraderos de autobús, mercados, entre otros.