Los peritos en balística de la Procuraduría General de la República (PGR) son los encargados de analizar los cartuchos y casquillos relacionadas con algún crimen para identificar el arma homicida y al delincuente; para ello cuentan con IBIS, Sistema de Base de Datos de Alta Tecnología, una herramienta digital que sirve para cotejar, en tiempo real, cada elemento balístico con 400 mil muestras a nivel nacional y, de ser necesario, con 16 servidores de Europa, Asia, América y África.
Cada mes, la PGR analiza en promedio entre mil 500 y 2 mil elementos en el Laboratorio de Balística Forense, de la Dirección de Servicios Periciales, y desde que se utiliza esta herramienta digital se han vinculado casi 3 mil armas de fuego con ilícitos, informó Sergio Sandoval de la Peña, perito ejecutivo técnico B, en entrevista.
IBIS es la herramienta tecnológica que permite que los peritos especialistas capturen la muestra, busquen, cotejen y analicen digitalmente las “huellas balísticas”, como se le llama a la marca exclusiva que deja cada arma en el elemento balístico.
“Las armas dejan cuatro marcas en el casquillo y en la bala dejan dos marcas. Cada arma presenta características únicas que no se repiten en ninguna otra.
“Contamos con un equipo de última generación que se llama IBIS. Nos va ayudar a que la información, que una vez ingresada al sistema se convierte en una firma electrónica, busque posibles coincidencias con los demás sitios conectados a la red PGR; si encuentra coincidencias nos da los resultados y podemos ver las imágenes, tanto del sitio donde yo ingresé los elementos como del sitio remoto donde es probable que esté la coincidencia del arma involucrada en un delito, si presenta coincidencias estamos en presencia de un acierto o un hit y lo que procede es solicitar físicamente esos elementos para poderlos confrontar en el microscopio y confirmar el resultado”, explicó Sandoval de la Peña.
En el archivo digital de IBIS también está la “huella digital” de las armas de cargo asignadas a los policías estatales y municipales de varias entidades del país; por tratarse de información vulnerable, los peritos no precisaron de qué corporaciones se trata.
Para descubrir un arma homicida, el perito hace pruebas de disparo con el objetivo de obtener un testigo, como se le llama al elemento balístico a comparar con el elemento a investigar, con el objeto de estudio se analizan las evidencias en el microscopio, en imágenes del casquillo o percutor en segunda y tercera dimensión que permiten ver más detalles, y se presenta el dictamen final, explicó el especialista en balística a 24 HORAS.
“IBIS nos va a permitir determinar si un arma de fuego estuvo en el lugar de los hechos o si fue la que lesionó o causó la muerte de una persona, esa huella balística hallada en la escena del crimen va a hacer que tengamos el indicio y las marcas para poder confrontar un arma de fuego, y hacer los estudios para poder relacionar la bala y el casquillo con el arma y ayudar a resolver crímenes.
“En el laboratorio balística somos 19 peritos, hacemos diferentes estudios, el ingreso de la huella balística al sistema IBIS, la identificación de armas de fuego, estudios micro comparativos, estudios GRC, estudios de trayectorias, de blindajes y pruebas de disparo”, subrayó el especialista.
El sistema es presuntivo y por ello se realiza un segundo comparativo en el microscopio que permite acortar tiempos de respuesta, Raúl Pedraza Flores, especialista en balística.