Debido a una denuncia anónima, la Procuraduría General de Justicia capitalina realizó un operativo en dos bares ubicados en la delegación Cuauhtémoc, que derivó en el rescate de 51 mujeres que eran explotadas sexualmente y la detención de siete probables responsables.

 

La fiscal central de Investigación para la Atención del delito de Trata de Personas, Juana Camila Bautista Rebollar, dijo que uno de los imputados es propietario de La Tirada y By Latino; el primero localizado en calle Colón, colonia Centro y el segundo ubicado en calle Pedro Moreno, colonia Guerrero.

 

En conferencia de prensa, la fiscal explicó que integró la averiguación previa contra Francisco Javier Soto González, de 50 años de edad, propietario; Gerardo Pánfilo Guerrero Hernández, de 60, administrador; y Rubén López Hernández, de 52, capitán de meseros.

 

Además, Germán Bolaños Carrera, de 42 años de edad, encargado; Juan Carlos Rodríguez García, de 37 años, encargado; José de Jesús Echeverría Leal, de 46 años, seguridad, y Hugo César Cubillos Bravo, de 38 años, mesero y quien cobraba los bailes privados.

 

Bautista Rebollar detalló que de acuerdo con el expediente, las afectadas eran enganchadas por los encargados de los negocios para hacer bailes eróticos, después las obligaban a despojarse de sus prendas hasta quedar desnudas.

 

“Las agraviadas también tenían que inducir a los clientes a ingerir bebidas alcohólicas y que las invitarán a sentarse con ellos; un porcentaje del costo de la copa era para ellas y el resto para los bares”, expuso la funcionaria.

 

Relató que por el consumo de tres copas seguidas, el comprador tenía derecho a sostener relaciones sexuales con las mujeres en un cuarto privado; cada local tenía sus habitaciones para este fin y el pago por el sexoservicio se establecía en común acuerdo entre la ofendida y el solicitante.

 

“Además si alguna de las explotadas era requerida para salir del establecimiento para sostener relaciones sexuales con el cliente en hoteles cercanos, el costo era acordado por los encargados y se establecía dependiendo de la persona solicitada”, detalló la fiscal.

 

Una vez integrada la averiguación previa, y luego de ser identificados por las ofendidas, a través de la cámara de Gesell, los imputados fueron consignados al Reclusorio Preventivo Oriente, donde quedaron a disposición de un Juez Penal en turno por el delito de trata de personas, en su modalidad de explotación por prostitución ajena.

 

Indicó que las mujeres agraviadas recibieron apoyo psicológico, médico y orientación jurídica y el dictamen de psicología forense determinó afectación y alto grado de vulnerabilidad, por lo cual la Subprocuraduría de Atención a Víctimas del Delito y Servicios a la Comunidad intervino para brindarles apoyo integral.

 

En cuanto a los inmuebles asegurados, éstos serán propuestos para la aplicación de la Ley de Extinción de Dominio, añadió.

 

dc