Un total de 33 casos de tuberculosis pulmonar en 12 comunidades de Ayutla de los Libres, Guerrero, fueron confirmados por las autoridades sanitarias municipales.

 

El centro de la infección se detectó en un perímetro de 50 kilómetros. Los médicos del municipio aseguraron que se trata de una pandemia, que puede crecer, que el gobierno del estado no quiere reconocer y, por el contrario, quiere esconderlo.

 

La mayoría de los enfermos son niños de entre 5 y 16 años, y los síntomas que padecen son pérdida de peso, fiebre nocturna, tos y en una etapa final tos con sangre.

 

Hortensia Aldaco, directora municipal del DIF, dijo que tiene pleno conocimiento de la situación y seguró “el municipio le ha pedido ayuda al gobierno estatal, pero el Gobernador de Guerrero sigue sin responder a nuestras llamadas de auxilio”.

 

Este diario estuvo en la zona, tomó fotografías de los enfermos y la doctora Astrid Pérez, directora de salud del municipio de Ayutla, compartió la lista de los 33 enfermos que contiene nombres, edad y comunidad en la que viven.

 

“Estos brotes son la respuesta de la miseria, la desnutrición y la crisis sanitaria que vive Guerrero”, expresó la especialista.

 

En el municipio de Ayutla hay comunidades mixtecas y tlapanecas, la mayoría de sus habitantes no hablan castellano; lo que les complica mucho para poder defender sus derechos y pedir ayuda.

 

Luis Armando Pérez, habitante del poblado de San Antonio, aseguró que la situación es grave con respecto a la tuberculosis y que se ven cada vez más casos de brotes de esta enfermedad.

 

Lo único que piden, expresó, son médicos capaces y la intervención y ayuda permanente del gobierno Federal.

 

Hospital deplorable

 

En un recorrido por el Hospital General de Ayutla se pudo apreciar la condición en la que se encuentran sus instalaciones, sucias y con equipo viejo. El servicio médico ha sido rebasado totalmente por la cantidad de enfermos, ya que este nosocomio atiende a los pobladores de seis municipios, que incluyen 115 comunidades y 30 colonias de Ayutla.

 

La doctora Yadira Gallegos explicó que sólo hay un médico por servicio y que el hospital le da prioridad a las mujeres embarazadas.

 

“Este no es un Hospital General, tiene el nombre pero nada más, aquí hay puros médicos generales y un hospital general, debe tener todas las especialidades abiertas las 24 horas, este hospital no tiene ni los medios, ni el personal para poder atender emergencias reales, no tenemos ni un anestesiólogo”, expresó.

 

Parte de los médicos no se encuentran a causa de las amenazas del crimen organizado que los obligaron a huir. Empleados del nosocomio relataron que hombres armados llegaban con pacientes heridos de bala y los forzaban a atenderlos.

 

“Ahora ya se calmó, la policía comunitaria acabo con los de la maña” comentó uno de los entrevistados.

 

El Ejército revisó este fin de semana las instalaciones del hospital, como parte de la atención a las emergencias por las lluvias y, al verlo, el mayor Díaz no pudo evitar decir en voz alta: “es deplorable y penoso”.

 

Ni siquiera emergencias

 

La situación es tan grave en el hospital, que se reciben sólo casos extremos, ni siquiera urgencias. Así ocurrió con Gabriela de 12 años y de Sara Cruz Cresencio de 35, quienes viven en El Ahuecachahue, un poblado de la sierra de Guerrero a 3 horas de camino de Ayutla de los Libres; ambas tienen una desnutrición severa y tuberculosis pulmonar avanzada. Pero no hay camas, ni equipo ni personal, por lo que el médico de guardia no lo trata como una urgencia, porque no se les pueden practicar estudios, ni brindar atención básica.

 

El doctor simplemente les pidió que se fueran a su casa que está a cuatro horas de distancia y que regresen a consulta al otro día, para ordenar los estudios, que no se realizarían el mismo día, ni en el mismo lugar.

 

Pero personal del Ejército desplazado en la zona por la emergencia de las lluvias, pidió un helicóptero ambulancia y las dos mujeres fueron trasladadas al Hospital General de Acapulco.