LA HABANA. La última reflexión del expresidente cubano Fidel Castro fue apenas un anticipo de que seguirían sus ideas sobre la religión, las cuales tras su muerte anoche, quedarán pendientes.

 

Fue también un texto que cerró con una descalificación tanto al ahora presidente electo estadunidense Donald Trump, como al mandatario Barack Obama.

 

“Habrá que darles ahora una medalla de barro”, fue la frase con la cerró la que sería su última colaboración escrita el 8 de octubre pasado.

 

En sus “Reflexiones”, Castro abordó varios temas de la política internacional luego de que dejó la presidencia cubana, la última de ellas hace menos de mes y medio.

 

En ese texto reconoció las virtudes de la religión, cuyos principios tienen más cualidades que los que son meramente políticos, anotó.

 

“De Cristo conozco bastante por lo que he leído y me enseñaron en escuelas regidas por jesuitas o hermanos de La Salle, a los que escuché muchas historias sobre Adán y Eva; Caín y Abel; Noé y el diluvio universal y el maná que caía del cielo cuando por sequía y otras causas había escasez de alimentos”.

 

“Trataré de trasmitir en otro momento algunas ideas más de este singular problema”, escribió en el penúltimo párrafo.

 

Y en el último se refirió brevemente al primer debate presidencial estadunidense entre los entonces candidatos Hillary Clinton y Donald Trump, aunque también mencionó al presidente Barack Obama.

 

“El señor Trump, que se suponía un capacitado experto, quedó descalificado tanto él como Barack en su política. Habrá que darles ahora una medalla de barro”. JMS