México se encuentra a punto de concretar la implementación de la reforma energética, pues sólo falta la presentación del marco regulatorio secundario, así como la definición de los contratos petroleros para la licitación de la Ronda Uno que se realizará a principios de noviembre, destaca la subsecretaria de Hidrocarburos de la Secretaría de Energía, Lourdes Melgar.
En entrevista con 24 HORAS, señaló que el próximo reto en materia energética será crear un modelo de contratos y licitaciones que maximice la renta petrolera para el país, pero que sea suficientemente atractivo para las empresas que deseen invertir, con el objeto de atraer 12.6 billones de dólares al sector.
En menos de dos meses se publicaron las bases de los contratos petroleros con la Ronda Cero y Ronda Uno, así como la firma del Fondo Mexicano del Petróleo, y la designación de sus consejeros independientes, así como de CFE, Pemex y el Instituto Mexicano del Petróleo.
Sin embargo, firmas de abogados como Baker Botts en Estados Unidos, han declarado a medios como Wall Street Journal que existe escepticismo sobre la capacidad del gobierno mexicano para ofrecer contratos competitivos a nuevos inversionistas, además de crear una industria petrolera con capital privado mexicano que sea competitiva.
¿Cómo maximizar el beneficio de la renta petrolera, y a la vez atraer la inversión al sector?
Hemos realizado distintas reuniones para precisar el interés sobre las áreas que hemos incluido en la Ronda Uno. Estamos escuchando todas las opiniones, y valorando el tipo de empresas que queremos tener ahí. Tienen que reunir una serie de capacidades técnicas, financieras y de ejecución para asegurar el desarrollo eficiente de un campo. La empresa ganadora no sólo tendrá que calificar en este sentido, sino también la que ofrezca el mejor beneficio económico para el gobierno federal.
¿En el caso de las compañías mexicanas, existen las condiciones para que se conviertan en verdaderas petroleras?
Empresas contratistas de Pemex buscan convertirse en empresas operadoras. Tendrán que hacer un esfuerzo para cumplir con requisitos técnicos y financieros. Lo que vemos también son empresas que surgen de la asociación entre empresas que aportan capital material y humano así como experiencia en la explotación de hidrocarburos, y otras como Alpha que ha producido petróleo de lutitas del otro de lado de la frontera. Si nos basamos en la experiencia internacional, existen empresas petroleras colombianas que han llegado a figurar a nivel mundial después de su reforma energética, como es el caso de Pacific Rubiales.
¿Cuánto tardaría este proceso para que una empresa mexicana pueda figurar a nivel mundial como Pacific Rubiales?
No quisiera dar un tiempo, pero lo que quisiera decir es que tenemos una estrategia clara para fomentar el desarrollo de empresas mexicanas. Es una política pública acompañada de recursos, como el fondo creado para contratistas y proveedores que busca apoyar a las Pymes para que se capaciten y se certifiquen. No sólo con la mira puesta en que se conviertan en proveedores de la industria nacional, sino a nivel global. Estamos evaluando en términos de la Ronda Uno cuales son las áreas de mayor interés para que puedan entrar empresas mexicanas.
¿Se busca crear un “ecosistema” que se vuelva un semillero de grandes empresas?
Exactamente, es ir generando las cadenas de valor, y otra cuestión en la que estamos trabajando es el programa de formación de recursos humanos. Es un programa importante porque no sólo se otorgarán becas a nivel de maestría y doctorado, también a licenciatura. Es importante crear un capital humano que pueda trabajar para la nueva industria petrolera mexicana.
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