El pánico se apoderó de Ciudad Nezahualcóyotl por los rumores de violencia desatados desde la tarde del miércoles. La escasa información oficial abrió el canal para los rumores y las mentiras, que desde el mediodía del jueves contaminaron al oriente y al sur de la ciudad de México, en el fenómeno de desinformación viral más notable en la memoria del centro del país.

 

Los rumores comenzaron poco después de que un enfrentamiento en Chicoloapan, un municipio cercano, entre taxistas afiliados al PRD y Antorcha Campesina, aliada al PRI que dejaron 1 muertos y 20 heridos. Las versiones que circularon de boca en boca en Neza, gobernada por el PRI, era que antorchistas habían llegado para vengarse.

 

Viejos problemas estallaron el día en que Eruviel Ávila rindió su primer informe de gobierno y horas antes de que el presidente Felipe Calderón recibiera al presidente electo Enrique Peña Nieto, para pactar la transición de gobierno. Salvo las reacciones vespertinas de las autoridades de Neza, horas después de que los rumores corrieran libremente, ninguna otra atajó con firmeza las versiones que produjeron la alarma.

 

La comunidad de Neza se fue a dormir en la zozobra y el jueves se notaron las consecuencias. El comercio cerró en su mayoría y entre 20 y 30% de las escuelas suspendieron clases. Durante varias horas la estación del metro en Pantitlán, donde confluyen todas las líneas que conectan el oriente de la capital con la ciudad de México, estuvo cerrada, con lo que se interrumpió el tránsito de casi medio millón de personas que utilizan ese sistema de transporte.

 

Las versiones de enfrentamientos entre grupos armados eran falsas. Las afirmaciones en las redes sociales que se habían instalado retenes militares en esa zona, también. Todos los dichos repetidos de balaceras y golpes, no tenían sustento con la realidad. Un vocero de la presidencia municipal de Neza insistió en la misma red social que no había problema alguno en la zona, pero no le creyeron.

 

En un recorrido realizado por 24 HORAS este jueves se pudo constatar que comercios de todo tipo lucían cerrados o dispuestos a hacerlo al menor indicio de problemas: farmacias, panaderías, tortillerías, estéticas, tiendas de abarrotes, e incluso una sucursal de Elektra, mostraban las cortinas metálicas corridas o semiabiertas ante el miedo provocado por los rumores.

 

La incertidumbre se extendió a la ciudad de México. En la Facultad de Estudios Superiores Zaragoza, de la UNAM, que se encuentra en Iztapalapa, en el Distrito Federal, la asistencia se redujo en 40% de acuerdo con profesores consultados. La sicosis no se quedó en la zona oriente ya que la Universidad del Valle de México evacuó los campus Coyoacán, Tlalpan y San Ángel, a decenas de kilómetros de Neza, ante informes de disturbios en zonas aledañas a dichos planteles. En su cuenta de Twitter se informó que la medida se tomó para “proteger la integridad de la comunidad”.

 

La delegada en Iztapalapa, Clara Brugada, aseguró que no se había presentado ningún problema en su delegación. “Lo que hay ahora es un vil rumor que ha metido en una situación de alerta, nerviosismo, a la comunidad” dijo a Panorama Informativo Tercera Emisión.

 

El gobierno del Distrito Federal hizo un llamado a la calma ante la ola de rumores sobre posibles enfrentamientos en la zona limítrofe de Iztapalapa y el municipio mexiquense de Nezahualcóyotl. La Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF) pidió a los capitalinos hacer caso omiso de los mensajes que se han expandido en las redes sociales durante las últimas horas, pero no frenaron la especulación que se alimentó en el espacio virtual durante casi 24 horas de haber viajado sin atajarse.

 

Durante casi un día la respuesta institucional a los rumores fue limitada. Con el vacío de información oficial, la especulación estimuló el miedo. “Ahí vienen y dicen que vienen robando, matando y quemando”, era la frase repetida en tiendas y calles.

 

Pero ni transeúntes ni conductores del transporte público podían explicar su origen. De hecho, nadie lo preguntaba y todos adjudicaban responsables. Unos decían que los antorchistas, otros que los perredistas, otros más mencionaron a la Familia Michoacana y otros de plano dijeron no saber, pero desde el miércoles por la tarde han escuchado la misma frase: “ahí vienen”.

 

Para las autoridades de Ciudad Nezahualcóyotl el episodio es un simple susto y señalan que el miércoles hubo un enfrentamiento en el municipio de Chicoloapan, entre un grupo de Antorcha Popular y perredistas. Aunque este municipio ni siquiera colinda con Neza, se tomaron medidas preventivas como el cierre de algunos accesos viales y se enviaron patrullas a diversos puntos donde se reportaban enfrentamientos, pero el reporte es que no hubo uno solo.

 

Los llamados a la calma de la autoridad no surtieron efecto y en las redes sociales se propagaron versiones que lindaban con la tragedia; no sólo se hablaba de comercios cerrados y la eventual ola de saqueos, sino de ataques contra escuelas, bombas e incendios de casas y comercios. Nada de eso se observó en el lugar.

 

Transportistas que cubren la ruta metro Pantitlán-Nezahualcóyotl contaron que el miércoles por la tarde se informó a los usuarios que no habría servicio ante el temor por hechos de violencia; los conductores se retiraron a sus casas abandonando a los pasajeros a su suerte. Autoridades municipales señalaron que los conductores de colectivos aprovecharon para aumentar las tarifas a los usuarios por el “riesgo” que corrían al internarse en el municipio.

 

Ayer la situación se normalizó por la mañana, los comercios abrieron y únicamente algunas de las escuelas cerraron por precaución. Sin embargo, hacia las 13 horas el rumor volvió a esparcirse entre y provocó que los comercios cerraran en cuestión de minutos.

 

Para la tarde de ayer el pánico había rebasado la frontera con el Distrito Federal, provocando el cierre de comercios y empresas en las delegaciones limítrofes con los municipios mexiquenses afectados, como fue el caso de la colonia Agrícola Oriental en Iztacalco, contigua a Ciudad Nezahualcóyotl y Leyes de Reforma en Iztapalapa.

 

La tarde de ayer, 24 horas después de que iniciaran los rumores, Salvador Neme Sastre, secretario de Seguridad Pública del Estado de México, difundió un video en YouTube en el que afirmó que “los rumores que irresponsablemente se han difundido sobre hechos violentos, son solo eso, rumores”.

 

La consejería jurídica del gobierno del DF informó que detuvo a cuatro personas en Iztapalapa que recorrían las calles advirtiendo que habría violencia. Juan Ramón Sánchez, de 22 años, fue detenido en la Agrícola Oriental a las 17.20, y David Guerrero, José Luis Plata y Mayne Osorio, de 37, 40 y 37 años, respectivamente, fueron interceptados en la misma colonia, minutos más tarde.

 

La pena por esa falta es de 25 a 36 horas de arresto o una multa de 21 a 36 días de salario.

 

(Con información de María Idalia Gómez y Mónica Hernández)