En Palacio Nacional, el presidente Enrique Peña Nieto estuvo acompañado de la reina Máxima, de los Países Bajos, asesora de la Organización de las Naciones Unidas para la Inclusión Financiera, quien reconoció al gobierno federal por los ahorros obtenidos con la implementación de esa política.

 

“En el 2010, el Gobierno mexicano comenzó su gran esfuerzo para digitalizar las transferencias sociales hechas previamente en efectivo. Esto representó un ahorro estimado de mil 270 millones de dólares por año en los costos de pago de salarios, pensiones y transferencias sociales”, dijo.

 

La asesora de la ONU manifestó que uno de los retos será “el incremento de cuentas móviles. Será esencial para impulsar significativamente la inclusión financiera en México. Específicamente me complace ver que la política tiene como objetivo usar innovaciones tecnológicas para difundir el uso de productos y servicios financieros“.

 

“México es uno de los pocos países en el mundo donde se mejoró la brecha de género en la inclusión financiera; o sea, que la situación de las mujeres se mejoró en este aspecto”, apuntó.

 

Resaltó que el país tiene un “potencial de proporcionar cuentas bancarias a 29 millones de adultos adicionales para el año 2020. Para ello se requerirá un liderazgo fuerte, una estrecha cooperación que incluya a los actores tanto públicos como privados y una muy cuidadosa planeación”.