Es cuestión de tiempo para que en México los proveedores de televisión por cable evolucionen, tanto en valor agregado como en precios al público. Esta semana The Wall Street Journal adelantaba negociaciones de Apple con diversas firmas generadoras de contenido, para ofrecer a partir de otoño próximo en Estados Unidos servicios de televisión ‘a la carta’ a través de internet con su Apple TV.

 

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Sin duda esto es un punto de partida del nuevo paradigma del consumo de televisión en el mundo: Contenidos a la medida del consumidor sin spots comerciales y sin cuotas onerosas.

 

En México, el consumo de contenidos de video ya no depende sólo de la televisión. Netflix se ha convertido en una alternativa que capta la atención de más y más personas, máxime cuando la necesidad de estar informado ya no recae solamente en los noticiarios televisivos sino en twitter, blogs y sitios de noticias online.

 

Por ejemplo, Crackle, una red multiplataforma de video de Sony Pictures Television, fue clasificada como la aplicación móvil número uno en visitantes únicos, de acuerdo con las firmas de análisis de audiencias online comScore Mobile Metrix y comScore Video Metrix,

 

dentro de la categoría de entretenimiento en México, Argentina y Brasil.

 

Este informe de comScore Inc. confirma que el consumo de contenidos tradicionalmente típicos para la televisión está cambiando en el país. La gran penetración de dispositivos móviles conectados a internet está envenenando a las cadenas de televisión tradicional, las cuales no sólo perderán audiencia AAA, sino, sobre todo, anunciantes que buscan a los consumidores con poder de compra.

 

La creciente demanda por parte de los usuarios de México y América Latina por consumir contenido de películas y seriales televisivos en cualquier momento, lugar, y en cualquiera de sus dispositivos móviles ha permitido que Crackle, una aplicación móvil gratuita, se convierta en la red de video líder en minutos consumidos al mes por espectador.

 

Como red de entretenimiento, Crackle ofrece películas y series de TV populares producidas por los estudios de Hollywood en portugués, español e inglés. El contenido se transmite sin corte ni edición, y el usuario puede disfrutar de diferentes géneros.

 

El vicepresidente y gerente General de Crackle América Latina, José Rivera Font,comentó en días pasados que los anunciantes de televisión creen en el poder del video de largo formato. Por ello buscan tomar ventaja de la audiencia en plataformas como Crackle que no atan al espectador a un lugar específico.

 

Según un informe de eMarketer, dado a conocer en diciembre de 2014, los gastos totales de publicidad en medios, en dispositivos digitales y en Internet móvil, ascenderán a mil 410 millones de dólares durante 2015 en Latinoamérica.

 

De esa cantidad, 600 millones de dólares corresponden a Brasil, 400 millones a México, 60 millones a Argentina y 350 millones de dólares a otros países de la región.

 

El informe proyecta además un crecimiento también para Latinoamérica de seis mil 380 millones de dólares para 2018, de los cuales dos mil 910 millones corresponderán a Brasil, mil 360 millones a México, 510 millones a Argentina, y mil 600 millones de dólares a otros países de América Latina.

 

Así, los grandes consorcios de la televisión que han acaparado el mercado mexicano tienen por fin en internet un competidor poderoso que los obligará a ofrecer más y mejores contenidos en televisión de paga, a un menor costo para el consumidor. De lo contrario muy pronto habrá un requiem por SKY, Cablevisión, Cablecom… entre otras.

 

Será interesante ver qué tan nerviosos se ponen los accionistas en México y Estados Unidos de empresas como TV Azteca y Televisa que simplemente siguen con una propuesta y muy poco innovadora en cuanto a una oferta multiplataforma eficaz.