El nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México entrara en operaciones en 2020, mismo año en que cerrará el actual complejo aeroportuario Benito Juárez, por ello el Gobierno de la República y el del Distrito Federal deberán diseñar un plan de reconversión del inmueble.

 

En tanto esto ocurre, arquitectos de varios estados y países, convocados por la revista Arquine, ya diseñaron propuestas que van desde áreas de vivienda, comercios y escuelas, combinadas con espacios verdes y espejos de agua, hasta zonas de cultivo con chinampas o un manifestódromo que sustituya al Zócalo.

 

Lo anterior en el marco del concurso Pulmón metropolitano de oriente, para el cual se recibieron 178 propuestas, de las cuales se eligieron 12 por parte del jurado y se premiaron a tres ayer en el Museo de la Ciudad de México.

 

El proyecto que obtuvo el primero lugar, titulado Paisaje de inclusión, plantea la creación de zonas de usos mixtos para comercios, plazas, espacios públicos, foros culturales, hospitales, universidades, viviendas tipo residencial y de interés social, así como espejos de agua con capacidad de captación pluvial.

 

El segundo lugar, llamado, Simplemente añada agua, propone la recuperación del lago que alguna vez existió en esa zona y regiones agrícolas que funcionen como principal fuente de alimento para la ciudad, bajo un modelo de chinampas zonificadas dependiendo el tipo de actividad.

 

“Con esto no sólo se logra una nueva educación alimenticia, donde la sociedad se estaría acercando a proceso más sanos y naturales, sino que evita la transportación de productos desde otros puntos lejanos”, menciona el proyecto.

 

El tercer lugar fue para El borde y el vacío, que plantea la instalación de una enorme área verde al centro del terreno del futuro ex AICM, mientras que los edificios y la infraestructura estarían en la periferia del inmueble de más de 700 hectáreas, que representan el 1% del suelo urbano del Distrito Federal.

 

En la premiación estuvieron presentes los secretarios de Desarrollo Urbano y Vivienda y de Desarrollo Económico, Felipe de Jesús Gutiérrez y Salomón Chertorivski, respectivamente, quienes aseguraron que estos proyectos representan ideas que el gobierno capitalino podría analizar para añadir a su opinión sobre lo que deberá ser el futuro ex AICM.

 

Chertorivski señaló que para la intervención del terreno “no cabe la voracidad inmobiliaria, pero tampoco el conservadurismo a ultranza”, por lo que la propuesta que haga el gobierno local deberá estar en un punto medio que conjugue vivienda, negocios, áreas verdes y espacios públicos.