Padres de familia detectaron un patrón recurrente en el caso de abuso sexual en contra de niños en el Colegio Montessori Matatena, por tal motivo aseguran que el 8 de diciembre de 2015 presentaron una queja ante la secretaría de Educación Pública (SEP), sin embargo indicaron que van seis meses y “no nos han contactado”.

 

De acuerdo con Sara, madre de un menor abusado en esa escuela, narró que presuntamente Rafael Leopoldo Duarte Pereda se llevaba en grupos de cuatro; a tres los hacía jugar a las escondidillas en el baño, a los bebés les quitaba la ropa y les daba “la medicina como doctor”.

 

Mientras que Israel, padre de otra menor, recordó que ellos sacaron a su hija el 24 de noviembre del año porque la niña “mostró un comportamiento atípico. Estaba con ira, estaba enojada. Cosa que no había pasado. Mencionamos a la directora que esto estaba pasando porque decía que le gritaban mucho y no quería ir a la escuela”.

 

El papá narró haber presenciado como Patricia Guitián Galán, directora de la escuela, gritaba a su hija “de manera excesiva.” De inmediato le reclamó “le dije no le grites ella entiende con instrucciones”.

 

Indicó que en la carta entregada piden “cambio de profesores porque quienes conviven con los niños menores no tenemos ninguna información de su formación, preparación ni absolutamente nada y los han cambiado sin notificar a los padres de familia…”.

 

También señalaron que el esposo de la directora “está conviviendo con los niños sin ser personal docente administrativo. En diciembre, cuando nos reunimos en la casa de Sara detectamos un patrón de comportamiento que todos los niños decían ‘Rafa me pega en la cabeza con un palo’. Una persona que no debería estar ahí y le informamos a la SEP.”

 

Sara indicó que durante la prueba pericial un niño dibujó un pene pero “la perito lo rompe y tira a la basura. No sabemos. Es una prueba contundente que el niño está expresando qué está pasando.”

 

Expresó que en la misma PGJ está la Sección C de investigación “donde sí hay un lugar adecuado para atender a los niños y sí hay peritos especializados que no nos habían ofrecido desde el primer día.” Expresó que los niños están realizando de nuevo otro peritaje con lo cual “están siendo revictimizados porque están pasando por un nuevo proceso.”

 

Israel indicó que les llevó tres días levantar una denuncia. “Llegamos a la PGJ (dijeron) espérense a que el Ministerio Público tome la declaración, pero no había médico legista y vámonos hasta Iztapalapa. A las dos de la tarde saco a mi hija de la escuela, fuimos y terminamos a las 11 de la noche. El segundo día, viene el peritaje sicológico donde sientan a mi hija en un escritorio y enfrente a estar platicando.”

 

Este miércoles, la hija de Israel se encuentra la tarde de este miércoles en la unidad especializada.

 

Sara denunció que Duarte Pereda “se reservó el derecho a declarar, lo llevó por escrito y nos enteramos que ni siquiera pasó al primer piso de delitos sexuales, lo mandaron a otra sección privada. Los niños han tenido que pasar mínimo seis horas y hasta 11 para ser atendidas.”

 

Mencionó que su hijo de tres años estuvo ayer seis horas en la PGJ para pruebas psicológicas y hace 20 días esperó 11 horas.

 

tpc