La toma de protesta de los 16 jefes delegacionales de la Ciudad de México estuvo marcada por el intercambio de señalamientos entre el PRD y Morena, pues diputados del primer partido llamaron intolerantes a los segundos y éstos “delincuentes electorales” a cuatro delegados del sol azteca.

 

Cuando el vicecoordinador del PRD en la ALDF, Raúl Flores, aludió a la “intolerancia” de Morena, los cinco delegados de este partido se retiraron del salón de Plenos, mientras que cuando los morenistas sacaron pancartas, en los palcos salieron simpatizantes del sol azteca en defensa de sus líderes.

 

Poco antes del conflicto, durante la toma de protesta, los integrantes de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) exhortaron a los 16 jefes delegacionales a gobernar en forma coordinada para acabar con la inseguridad.

 

Los legisladores locales se comprometieron a su vez a pugnar por que haya más recursos para las demarcaciones, a fin de atender los principales problemas de la ciudadanía.

 

Al respecto el asambleísta José Manuel Delgadillo Moreno anunció que en la bancada del Partido Acción Nacional (PAN) “vamos por reformas para entregarles 70% del predial a las delegaciones”.

 

El panista fue secundado por Beatriz Rojas, que en representación del partido Morena señaló que su grupo parlamentario pugnará por fortalecer el presupuesto para las demarcaciones, “y esperamos que los grupos parlamentarios coadyuven para lograr este propósito”.

 

La legisladora de Morena fue interrumpida por simpatizantes del PRD, quienes le gritaron y mostraron mantas con algunas leyendas, lo que obligó al presidente de la Mesa Directiva, Luciano Jimeno Huanosta, a llamar al orden.