Un policía de Jacksonville, Florida (Estados Unidos), golpeó repetidas ocasiones y salvajemente en el estómago a una mujer detenida, y por lo tanto esposada, quien además se encuentra en estado de ebriedad.

 

Las cámaras de seguridad del lugar captaron el momento en que el agente Akinyemi Borisade golpea con dureza y el puño cerrado en el abdomen de la detenida, luego que ésta intentara patearlo, lo que aparentemente generó la reacción del agente.

 

Tras revelarse el video de la agresión, la actitud del policía generó gran indignación en Estados Unidos, por lo que fue cesado de sus funciones.

 

Según los superiores de Borisade en la Oficina del Sheriff de Jacksonville, éste actuó de una forma absolutamente desproporcionada y por eso fue separado de la institución.