SEATTLE. Vaya un festival aéreo desató la ofensiva de los Halcones Marinos de Seattle para derrotar a unos Acereros de Pittsburgh que se mantuvieron todo el partido en la pelea y sólo cedieron al final, ante la incontestable tarde del quarterback local, Russel Wilson, quien lanzó cinco pases de anotación y guio la victoria 39-30 de su escuadra.

 

La jugada clave del partido ocurrió con menos de dos minutos en el reloj. Falló Ben Roethlisberger, que había dado un pase de anotación apenas en el encuentro, pero consiguió 456 yardas, en 36 pase de 55 intentos. Fue un intento de pase largo que terminó interceptado por Kam Chancellor, justo una jugada después de haber estado a punto de otra intercepción.

 

Así, Pittsburgh dejó sin respuesta una anotación con una escapada de 80 yardas, la más larga de la temporada para Seattle, obra de Doug Baldwin, tras un pase corto de Wilson. Con ese touchdown, Baldwin completó tres en una de sus mejores tardes.

 

Los Acereros se habían mantenido en el juego hasta el tercer cuarto, que terminó empatado. En el último periodo, los Halcones Marinos y los Acereros culminaron las tres primeras series ofensivas con anotación, pero en la cuarta, con más de cinco minutos de posesión, Pittsburgh sólo consiguió responder a Seattle con un gol de campo. Los Halcones Marinos lograron otra anotación en apenas tres jugadas y, después, vino lo de Big Ben para concluir el juego.