Recientemente, uno hombre de origen palestino se introdujo en el perfil de Mark Zuckerberg, el fundador de una de las redes sociales más grandes del mundo, Facebook, para notificarle sobre una falla en su sistema sistema informátíco.

 

El hombre de nombre Khalil Shreateh podría recibir una recompensa por el reporte, reunida por un grupo de hackers donadores, luego de que la compañía se negara a pagarle la gratificación que ofrece a los usuarios que reporten fallas en su sistema.

 

Como Shreatech, muchos expertos en redes e informática pululan por todo el mundo y en la actualidad, los llamados hackers, ya no forman parte de ese segmento segregado de criminales electrónicos, sino que están saltando al otro lado.

 

Los etihical hackers, como han sido llamados, son piratas ciebernpéticos que se han convertido en un recurso importante para organizaciones, empresas y dependencias a lo largo y ancho del planeta.

 

Únicamente en México, los incidentes informáticos incrementaron su frecuencia un 40% durante 2012, informó el director general de la empresa Intersoftware, Carlos Sánchez.

 

Sombreros de colores

 

Los hackers tienen su propia clasificación y existen tres grandes grupos.

 

Los Black Hat, también llamados crackers y es un grupo constituido por quienes utilizan sus habilidades informáticas únicamente con propósitos ilícitos y de daño.

 

Por otra parte, los llamados Gray Hats, que son los que no siempre tienen “malas intenciones” aunque los medios para lograr sus fines no logran entrar en la legalidad.

 

Y ahora y cada vez son más ante el interés de las compañías por integrarlos, están los White Hats, son hackers certificados para hacer el bien y conocen todos los métodos de sus demás compañeros pero entre sus funciones básicas figura el diagnóstico de las fuerzas de seguridad electrónicas de alguna institución, detección de intromisiones y eliminación de estas.

 

Por llamarlos de alguna manera, estos tres sectores conforman a los hackers de gran escala, sin embargo también existen los llamados hackers libres, conocidos algunos como los Script kiddies y otros como los hackers universitarios; un grupo que va tomando fuerza por su rápido crecimiento.

 

Beneficios de los buenos piratas

 

– Ofrecer un panorama acerca de las vulnerabilidades halladas en los sistemas de información, lo cual es de gran ayuda al momento de aplicar medidas correctivas.

 

– Dejar al descubierto configuraciones no adecuadas en las aplicaciones instaladas en los sistemas (equipos de cómputo, switches, routers, firewalls) que pudieran desencadenar problemas de seguridad en las organizaciones.

 

– Identificar sistemas que son vulnerables a causa de la falta de actualizaciones.

 

– Disminuir tiempo y esfuerzos requeridos para afrontar situaciones adversas en la organización.

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