La influencia del arte taurino en la obra del artista Pablo Picasso (1881-1973) se debe a “sus raíces españolas y a la tradición pagana” europea que él mismo transforma y reinventa, afirmó el nieto del pintor Bernard Ruiz-Picasso.

 

 

La Galería Gagosian en el centro de esta ciudad explora en la exposición “Picasso: Minotauros y Matadores”, la relación simbólica entre las corridas de toros y las composiciones mitológicas a lo largo de su obra.

 

 

“Hay que recordar que Picasso es español y sale de esta tradición pagana donde la religión y las raíces son muy importantes”, afirmó su nieto.

 

 

En entrevista exclusiva con Notimex, Ruiz-Picasso señaló que desde su infancia Picasso pintó “cosas relacionadas con la sociedad con personas en las calles, la pobreza, pero también incluyó un poco de mitología”.

 

 

Durante un recorrido por la exposición, Ruiz-Picasso afirmó que su abuelo realiza autorretratos para esconderse de cosas de las que él mismo “no estaba muy orgulloso”.

 

 

“En los años 20 en un mundo fracasado con la Primera Guerra Mundial y una modernidad muy importante, él a través de su vida y de la realidad de sus actos ha hecho cosas de las que él no estaba siempre muy orgulloso”.

 

 

Entre los cuadros de la exposición no podían faltar las referencias a sus amantes en turno como Marie-Thérése Walter o Dora Maar.

 

 

Ruiz-Picasso explicó que “Picasso pinta lo que vive”, incluida su tórrida vida sentimental que está reflejada en su obra.

 

 

“Por ejemplo tenía a mi abuela (Olga) como esposa, a mi padre (Paul) como hijo y poco después quedarse con una jovencita (Marie-Thérése Walter) y después se separaron. Picasso pinta lo que vive”.

 

 

En “Minotauro y Mujer” (1937) aparece Picasso representado como minotauro junto a su amante Dora Maar, a quien había conocido en 1936 cuando aún estaba casado con Olga Khokhlova (aunque estaban separados).

 

 

Entretanto, “Cabeza de Minotauro” (1937) es un autorretrato del pintor que nació en Málaga y se mudó a París en 1904.

 

 

“Hay un autorretrato de Picasso como minotauro porque él ha tenido que escaparse a este mundo mitológico”, comentó Ruiz-Picasso.

 

 

Señaló que el propio Picasso dijo en los años 30 que no quería mostrar estas obras porque eran muy personales.

 

 

“Él ha dicho en los años 30 que no quería mostrar estas obras porque eran tan personales y tan íntimas, y después ha tenido que mostrarlas. Decía ‘he hecho lo que he hecho y lo voy a mostrar al público, ya no lo voy a esconder’”, apuntó Bernard a Notimex.

 

 

La exposición incluye 120 trabajos que datan de 1889 a 1971 desde el primer dibujo de un torero que pintó a los ocho años de edad y “Retrato de Paul como Torero” (1925) que es alusivo a su primer hijo -quien es el padre de Bernard Ruiz-Picasso.

 

 

“La exposición trata de esta transformación, de este interés que procede de su naturaleza, de su origen y de su país y de lo que son las nuevas maneras de crear en el siglo XX, que es una gran diferencia con el siglo XIX”.

 

 

Afirmó que el artista “se pone al frente del público, no esconde cosas”.

 

 

En cuanto al retrato más íntimo de la exposición, Ruiz-Picasso anotó que “es difícil contestar esta pregunta porque está en casi toda su obra”.

 

 

El fundador de la Fundación Paul, Christine y Bernard Ruiz-Picasso afirmó que en esta exposición existen referencias a la obra maestra “El Guernica” (1937) que se encuentra en el Museo Nacional Reina Sofía de Madrid.

 

 

“Picasso siempre se reinventa. Retoma elementos del pasado: del cubismo, el Periodo Azul, el Periodo Rosa y lo reimagina, lo rehace, lo transforma de nuevo”.

 

 

Agregó que “esta transformación llega hasta ‘El Guernica’. Es un momento muy importante porque es entre la Primera Guerra Mundial y finales de los años 30”.

 

 

Señaló que en ese momento el mundo estaba con mucha esperanza pero en una directriz en la que se vislumbran problemas. “Había un terror o un miedo de lo que es la naturaleza humana y de cómo se transforma.”

 

 

Bernard Ruiz-Picasso, quien nació en 1959, es hijo de Paul Ruiz-Picasso, primer hijo de Pablo Picasso y su primera esposa Olga Khokhlova y es uno de los herederos de la obra del artista junto con su media hermana Marina.