Luis Raúl González Pérez no dudó en mencionarlas por regatear o dilatar información a la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) sobre lo sucedido hace un mes –el 19 de junio pasado– en Nochixtlán, Oaxaca.

 

¿Cuáles son las principales instancias omisas?

 

-La Procuraduría General de la República (PGR) y la Fiscalía General de Oaxaca.

 

Falta también que la Defensoría de los Derechos Humanos del pueblo de Oaxaca entregue a la CNDH la información que hayan recabado del Registro Público de la Propiedad y del Comercio.

 

¿Quién ya cumplió –aunque fue apenas antenoche– y entregó la información que le fue requerida?

 

-La Comisión Nacional de Seguridad.

 

En la reunión que sostuvo ayer con la Comisión de Seguimiento de los sucesos en Nochixtlán que encabeza la senadora Mariana Gómez del Campo, el ombudsman nacional insistió en la necesidad y la importancia de obtener las respuestas solicitadas para poder “contrastar” todo el levantamiento que la CNDH tiene y realizar el análisis consiguiente.

 

Y vaya que la comisión cuenta con bastantes datos, según dio a conocer el propio González Pérez, pues desde las cuatro de la mañana del día siguiente de los sucesos llegaron a la zona y comenzaron a levantar información.

 

A la fecha, dijo, llevan 502 actas circunstanciadas, entre quejas y testimonios, tanto en Asunción Nochixtlán, Sinaxtla, San Pedro Ñumí, Tamazulapan, Huajuapan de León y en la propia capital de Oaxaca.

 

Cuentan con testimonios de 10 testigos de los hechos en inmediaciones del hospital básico comunitario; 29 de lesionados por arma de fuego, cuatro de lesionados por gas lacrimógeno y uno de lesionado por un cohetón. Entrevistas con los propietarios de los hoteles: Merli, Fandangos y Juquila, seis testigos de los hechos en la carretera internacional, a familiares de lesionados de la Escuela Normal Experimental de Huajuapan de León, 50 entrevistas a diversos comerciantes del tianguis que se instala los domingos.

 

Once entrevistas a policías federales lesionados –atendidos en la Ciudad de México–; una valoración médica a una policía federal que había sido retenida en las primeras horas del hecho.

 

Y, bueno, un montón de cosas más…

 

Valga el extracto de la relatoría que hizo el ombudsman a los legisladores, porque eso fue precisamente –todo el trabajo mencionado– lo que les ganó su respeto y evitó que lo apalearan en la reunión.

 

Rosario Robles y el champán.- La ex secretaria de Desarrollo Social nos dice: “Oye, la que tenía la champaña preparada era yo (y no José Antonio Meade)…”.

 

La hoy titular de la Sedatu se refería a los resultados del INEGI sobre los ingresos en los hogares –donde se ve una mejoría de hasta 30% o más entre los más pobres– y que han generado un fuerte diferendo con el Coneval.

 

Robles defiende los resultados. ¡Y cómo no si los datos se refieren a la etapa en que ella estuvo al frente de la Sedesol!

 

El caso es que Rosario, ante el diferendo entre el INEGI y el Coneval y el escándalo que se ha armado por las cifras, toma el tema con humor y apunta: “Hasta cuando hago las cosas bien me salen mal”.

 

Gemas: ahora sí, agárrense: Donald Trump se convirtió ayer oficialmente en el candidato presidencial del Partido Republicano para la elección que se jugará el próximo 8 de noviembre.