PEKÍN. La ofensiva lanzada por el gobierno chino contra la corrupción llegó a las Fuerzas Armadas. El general retirado Guo Boxiong, que fue durante una década el número dos de la Comisión Militar Central (CMC), el máximo organismo militar de China, fue condenado ayer a cadena perpetua por enriquecerse con sobornos.

 

Guo, vicepresidente durante una década de la Comisión Militar Central y el responsable del ejército de más alto rango que es condenado a prisión en China, también fue privado de sus derechos políticos de por vida y despojado de su título de general, según la sentencia, en la que también se ordenó la incautación de sus bienes.