El presidente Enrique Peña Nieto destacó las 12 obras de infraestructura vial que se han construido o modernizado en la zona central del país, para mejorar la competitividad del centro del país.

 

Con el objetivo extra de dar una mejor calidad de vida a quienes viven o trabajan en la zona metropolitana del Valle de México es que esta tarde inauguró la ampliación de la Autopista México-Puebla.

 

En este marco alabó el esfuerzo del gobierno mexiquense para cuidar la seguridad de las familias, pero ante los problemas registrados sobre todo en la zona oriente, confirmó el despliegue de más de tres mil elementos de las Fuerzas Armadas y la Policía Federal para respaldar las acciones de orden en el Estado de México.

 

 

 

De acuerdo con información oficial, los trabajos consistieron en la construcción del Distribuidor Vial Eje 6, que conecta la autopista con la vía libre; así como la edificación de dos viaductos (puentes para el paso sobre un camino sinuoso), la sustitución de tres puentes vehiculares y de 21 peatonales.

 

Los trabajos realizados requirieron una inversión de dos mil 300 millones de pesos, y cuenta con un espacio para alojar un sistema de transporte suburbano tipo Mexibús y forman parte del corredor carretero México-Puebla-Progreso, que a la vez se conecta con los ejes Puebla-Oaxaca-Ciudad Hidalgo.

 

En la zona, se estima un tránsito diario de 150 mil 800 vehículos, la población beneficiada asciende a dos millones de habitantes de las delegaciones Iztapalapa y Tláhuac, de la Ciudad de México; así como los municipios de La Paz, Valle de Chalco e Ixtapaluca, en el Estado de México.

 

La vialidad, de acuerdo la información, reduce los tiempos de recorrido de una hora 15 minutos a 25 minutos, elimina los “cuellos de botella” en la entrada y salida de la Ciudad de México y permitió generar dos mil 245 empleos, de los cuales 645 son directos y mil 600 indirectos.

 

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