Entre los mismos panistas les llaman “los maruchan”.
Así se refieren los blanquiazules históricos a aquéllos “dizque militantes” que se inscribieron súbitamente en el padrón de Acción Nacional durante los últimos años, particularmente bajo la presidencia de Gustavo Madero (2010-2015).
Según los cálculos de Ernesto Ruffo, a cargo de la Reingeniería del Padrón de Militantes, “los maruchan” suman alrededor de 30% del total del padrón (hay 480 mil militantes en el histórico).
O sea que los “instantáneos” rebasarían la cifra de 144 mil.
Y provienen de todo el país. Si bien la mayoría se “cocinaron” en Puebla, en el Estado de México y en el Distrito Federal (hoy Ciudad de México).
Bueno, el caso es que Ruffo y su equipo ya comenzaron el Programa de Actualización del Padrón. Dio inicio la semana pasada en los 46 municipios de Guanajuato.
Consiste, como su nombre indica, en reemplazar los datos históricos con los actuales de la persona. Incluye fotografía y la huella digital cotejada con el Instituto Nacional Electoral (INE).
De ahí pasará a las distintas entidades del país y calculan finalizar el proceso de actualización en enero de 2018 (seis meses antes de la elección presidencial).
Paralelamente, indica Ruffo, esperan que para octubre próximo, el CEN del PAN apruebe el proceso de suspensión de derechos –que es muchísimo más largo–, para complementar así la reingeniería del padrón.
¿Quiénes serían acreedores a la suspensión de derechos? De entrada, aquéllos que no se presenten a actualizar sus datos.
El mínimo de militantes que requiere hoy en día un partido para mantener el registro es de 224 mil, y debe estar representado en al menos 20 entidades federativas.
MIRANDA, BAJO LA MIRA.- De los amigos del Presidente de la República, el de Jocotitlán, Luis Enrique Miranda Nava, es el que peor fama tiene entre los propios mexiquenses.
Y sí, de hacer el trabajo de fontanero en Gobernación pasó a ocupar la cartera más lucidora y dadivosa del gabinete: la Secretaría de Desarrollo Social. La que lo mismo lo enfila como posible candidato presidencial, que como “operador electoral” en las próximas elecciones, sean las del Estados de México que la presidencial.
Imposible hacerse de la vista gorda ante este nombramiento. Más, si el ex secretario de Finanzas del gobernador Arturo Montiel y ex secretario general de Gobierno con Enrique Peña Nieto en el Edomex, quien entre sus laureles carga haber fungido como prestanombres de Montiel y el embate legal contra los ejidatarios de San Salvador Atenco, a los que ofreció 10 pesos por metro cuadrado por sus tierras para construir el nuevo aeropuerto.
Ricardo Anaya, dirigente nacional del PAN, lo advierte así: “Habrá marcaje personal sobre Luis Enrique Miranda Nava, pues no conocemos su experiencia en asuntos relacionados con el desarrollo social. Vamos a estar muy atentos a que los programas sociales no se utilicen con fines electorales”.
GEMAS: obsequio de Gabriel Quadri, diputado constituyente por Nueva Alianza, sobre el anteproyecto de Constitución que ha circulado: “Tal como está es absolutamente inaceptable, celebramos que sólo sea un borrador”.