JERUSALÉN. Un bebé de escasos meses murió y ocho personas más resultaron heridas tras un atentado cometido por un conductor palestino en el norte de Jerusalén (Israel). El agresor atropelló a los peatones que esperaban el tren ligero. Cuando intentó huir, un agente de policía le disparó, hiriéndole. Las imágenes difundidas por la televisión descartan que se trate de un accidente, ya que el conductor se dirige intencionadamente hacia los israelíes que esperaban el tranvía.

 

Mike Rosenfeld, vocera de la Policía, explicó, que el incidente ocurrió a media tarde en una zona conocida como “Amunition Hill”, vecina al barrio palestino de Sheij Jarrah.

 

“Policías en la zona le dispararon”, afirmó sin más detalles Rosenfeld, que se limitó a indicar que el incidente y las circunstancias del mismo están bajo investigación.

 

Según el Canal 10 israelí, el grupo islamista Hamas asumió la autoría del atentado. “Si es verdad que es un atentado, se trata de una respuesta natural a los crímenes de la ocupación”, afirma el dirigente de Hamas en el exterior, Ossama Badran.

 

La edición digital del diario “Yediot Aharonot” indicó, por su parte, que el sospechoso es un habitante de Jerusalén Este y que tenía antecedentes penales.

 

De acuerdo con el relato de los testigos, el coche, que procedía del aledaño barrio de la Colina Francesa, cambió súbitamente de dirección y se subió a las vías del tranvía arrollando a su paso a varios viandantes que se encontraban cerca de una parada del tren ligero.

 

El conductor del vehículo salió del mismo y según el Canal 10 de la televisión israelí trató de huir a pie, antes de ser tiroteado por un agente de seguridad que se encontraba en la zona. La radio pública israelí informó de que su estado es de extrema gravedad.

 

Tras conocerse el incidente, estallaron enfrentamientos entre agentes israelíes y jóvenes palestinos en los barrios de Suafat e Issawiyah, en Jerusalén Este. Grupos de palestinos lanzaron piedras y otros objetos contra el puesto de control de Qalandia, uno de los que regulan el paso entre la ciudad cisjordana de Ramala y la sección este de la ciudad santa.

 

Según testigos, la guardia de fronteras israelí respondió con métodos antidisturbios, sin que hasta el momento se hayan reportado heridos.

 

La tensión se ha disparado en los barrios árabes de Jerusalén desde que a principios de julio fueran hallados tiroteados los cadáveres de tres estudiantes judíos desaparecidos cuando hacían autostop cerca de la colonia de Gush Etzion, cercana a la ciudad palestina de Hebrón, acción de la que el gobierno culpó al movimiento Hamás.

 

Días después, un grupo de ultrarradicales judíos apresaron y quemaron vivo en Jerusalén Este a Mohamad Abu Jedeir, un palestino de 16 años, en una venganza que desató enfrentamientos en su barrio, Suafat.

 

Desde entonces, la zona este de la ciudad es escenario diario de protestas, enfrentamientos, ataques de palestinos y colonos judíos, acciones de vandalismo contra el tranvía y arrestos de ciudadanos palestinos.