El vuelo 1498 de American Airlines procedente de la Ciudad de México logró aterrizar satisfactoriamente en la ciudad de Miami pese a que durante el descenso chocó con un ave, la cual quedó incrustada en el casco frontal de la aeronave.

 

 

Aunque las colisiones de aves con aviones son algo que se podría considerar cotidiano, lo llamativo fue la facilidad con la que el pájaro perforó la nariz de la aeronave, lo que causó sorpresa entre los presentes quienes se apresuraron a documentar la impactante imagen.

 

Aunque en las imágenes se puede ver que el animal aún se mueve pese a estar clavado en el metal, finalmente murió y se llamó a los servicios de protección animal para hacerse cargo de los restos.

 

Además del pájaro no se registraron más heridos o percances. El avión que salió de del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México fue llevado mantenimiento para ser arreglado.

 

 

 

caem