Padres de familia de Oaxaca y Chiapas comenzaron a recuperar las escuelas tomadas por los maestros simpatizantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), para que sus hijos inicien cuanto antes su ciclo escolar.

 

Hasta el momento, hay por lo menos siete escuelas de educación básica que fueron recuperadas por los padres de familia en estos dos estados, además de que en otras comunidades han impedido el paro magisterial.

 

En San Juan Chamula, Chiapas, municipio de mayoría indígena, los padres de familia impidieron a los profesores irse a paro bajo la amenaza de castigarlos de acuerdo a sus usos y costumbres, siendo el escarmiento público, dejándolos amarrados un par de horas en la plaza principal, como el mayor castigo.

 

De igual forma, tres secundarias y un jardín de niños de Tapachula fueron recuperados por los padres de familia, quienes por medio de la presión verbal y el apoyo de maestros opositores al paro, ya laboran con normalidad.

 

Estas acciones se dan a pesar de que en varios planteles hay pintas donde se amenaza a los padres con represalias en caso de que los abran; aunque están firmados por la CNTE, los maestros disidentes se han deslindado de los mensajes.

 

En Oaxaca tres escuelas de educación básica fueron recuperadas por los padres de familia quienes convocaron a reuniones para definir la apertura del ciclo escolar.

 

Mientras tanto, en Huajolotitlán, municipio de mayoría mixteca, la presión de los padres mantiene abierta su escuela; pues a los maestros que se fueran a paro también advirtieron que los castigarían de acuerdo a sus usos y costumbres.

 

Para la presidenta de la Coordinadora General de Padres de Familia del estado de Oaxaca, Luisa García, la molestia es generalizada en toda la entidad, por lo que muchos papás quieren tomar cartas en el asunto, pero les pidió calma al momento de recuperar una escuela.

 

Por su parte, el director del Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca, Germán Cervantes, dijo que durante los recorridos que personal del instituto para supervisar la actividad de las escuelas, en siete comunidades ya solicitaron el cambio de plantilla docente, pues los maestros titulares no quieren dar clases.