La Procuraduría General de la República (PGR) debe abrir la información sobre la represión de los movimientos estudiantiles en 1968 y 1971, ordenó el Instituto Federal de Acceso a la Información y Protección de Datos (IFAI).

 

El órgano defensor del acceso a la información recibió de un particular un recurso contra la PGR por su negativa a satisfacer cabalmente su solicitud de información sobre esos acontecimientos y por tal motivo emitió este fallo.

 

La PGR declaró inicialmente la inexistencia de la información, pero después de interpuesto el recurso puso a disposición más de 19 mil hojas con documentos, notificando al ciudadano a un correo electrónico erróneo, distinto al que había colocado en su solicitud.

 

Asimismo, señaló el IFAI, la reproducción de los documentos le hubiera significado al particular un costo mayor a 9 mil pesos, “sin tener certeza de encontrar en ellas la información solicitada”.

 

El IFAI destacó que la información sobre presuntas violaciones a los derechos humanos no sólo debería ser pública, sino que las instituciones depositarias tendrían que tratarla de forma especial y aplicarle el principio de máxima publicidad.

 

“No invocar el principio de máxima publicidad de la información sobre expedientes que contienen evidencia de crímenes contra la humanidad o genocidio como lo tipifica el Código Penal Federal contradice la Ley de Transparencia, así como los principios mismos de la democracia”, señaló.

 

Por tanto, el Instituto instruyó a la PGR a modificar su respuesta, realizar una búsqueda exhaustiva de la información solicitada y poner a disposición del recurrente, de ser posible, versiones públicas de los documentos solicitados para su consulta presencial.

 

La información solicitada se refiere a sendas matanzas ocurridas en Ciudad de México en 1968 y 1971, cuando fuerzas militares y paramilitares reprimieron violentamente manifestaciones de estudiantes que protestaban contra el autoritarismo de la época.

 

La matanza de la Plaza de las Tres Culturas del 2 de octubre de 1968 dejó al menos 40 muertos, según datos oficiales, y hasta 400, de acuerdo con organizaciones civiles.

 

Mientras la del 10 de junio de 1971 cerca del Casco de Santo Tomás dejó al menos 22 fallecidos, numerosos desaparecidos y medio centenar de heridos. NS