Asociaciones civiles que ayudan a los migrantes denunciaron un aumento en los ataques contra los voluntarios que asisten a los inmigrantes provenientes de Centroamérica que utilizan el corredor de la zona centro para llegar a Estados Unidos, siendo el último hecho el del domingo 23 de noviembre donde dos personas fallecieron presuntamente a manos del crimen organizado en Huehuetoca.

 

Jorge Andrade, del Colectivo Ustedes somos Nosotros, explicó que el fin de semana dos de sus compañeros, de nombre Adrián y Wilson (se reservaron los apellidos por petición de los familiares) fueron acribillados después de que fueron a darles de comer a migrantes indocumentados en Huehuetoca, esto a pesar de que ya habían denunciado ante las autoridades amenazas por parte de los Mara Salvatrucha que opera en la región de Tequispiapan.

 

“Hemos visto que en las últimas fechas ha incrementado el número de personas que tratan con migrantes, los siguen secuestrando, hay presencia de camionetas en el basurero de Tequisquiapan, el único lugar donde tenían acceso a alimento y atención médica”, dijo.

 

El activista añadió que pese a que las autoridades tienen información de que al menos cuatro grupos de la delincuencia organizada operan en el corredor Lechería, Estado de México a Bojay Hidalgo, siguen sin actuar para proteger a los migrantes como a quienes los ayudan con alimentos, medicina o refugio.

 

Con estos, ya son cuatro los asesinatos a voluntarios promigrantes que el Colectivo tiene registrados en el último par de años, eso sin contar a otros seis que están protegidos por instrucciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.

 

En su intervención, el director de Servicios Jesuitas a Migrantes, Arturo González, calificó de preocupante la política migratoria del gobierno de Enrique Peña Nieto, ya que en lugar de realizar operativos contra el crimen organizado, lanza a los policías para detener a los indocumentados de Centroamérica, tal y como hace Estados Unidos.

 

“Se ha cambiado la política migratoria, es exactamente la de Estados Unidos, que es la de perseguir a los migrantes, es detener, es encarcelar y es deportar. En los hechos ese es el cambio de la política migratoria”, dijo.

 

González añadió que esto también afecta a los defensores de migrantes, pues a ellos también se les persigue por el simple hecho de ayudar a la gente, lo cual le es incomprensible.

MG