ANKARA. Las autoridades turcas han intensificado su rastreo en las redes del grupo terrorista Estado Islámico y han hecho varias detenciones para dar con los responsables del atentado contra el aeropuerto Atatürk de Estambul, que el martes dejó 44 muertos.

 

De momento han detenido a trece personas, de las que nueve son ciudadanos turcos y cuatro extranjeros, ha confirmado el ministro de Interior, Efkan Ala, en una comparecencia en el Parlamento.

 

Los sospechosos fueron arrestados durante una redada simultánea de la policía en 16 domicilios de Estambul, informó la agencia semipública de noticias Anadolu.

 

El diario Hürriyet asegura que uno de los tres kamikaze era un ciudadano ruso oriundo de la república autónoma de Daguestán, que había entrado en Turquía hace un mes, modificando así una información anterior según la que el sospechoso era de la vecina región de Chechenia y había estado en Raqqa, conocida como la capital del Dáesh en Siria.