El secretario general de OEA, José Miguel Insulza, dijo hoy aquí que tanto el gobierno como la oposición en Venezuela deben hacer concesiones para facilitar un diálogo urgente destinado a dar solución a la actual crisis política.

 

“Sin el reconocimiento por parte de la oposición de la institucionalidad vigente y, por parte del Gobierno, de la legitimidad de la oposición -de toda la oposición- no se puede llevar a cabo el diálogo que Venezuela necesita hoy” , advirtió Insulza.

 

El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA) señaló que la situación que vive ese país desde febrero pasado requiere una pronta respuesta de ambas partes.

 

Sostuvo que los enfrentamientos en las calles, las descalificaciones recíprocas y los sucesivos procesamientos y destituciones de miembros de la oposición “confirman nuevamente la necesidad de un diálogo amplio” en Venezuela.

 

Este deberá incluir al gobierno “y a todos los referentes opositores, junto a los representantes de las principales organizaciones sociales”, a fin de alcanzar respuestas comunes a la crisis política, económica y social” que vive esa país.

 

La declaración de Insulza tuvo lugar en la víspera del arribo a Caracas este lunes de una misión de cancilleres de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur).

 

Insulza consideró asimismo que la misión que emprenderán los ministros de la Unasur “constituye una nueva oportunidad para que las partes en conflicto reconozcan la urgencia de acordar puntos mínimos de entendimiento”.

 

Explicó que sólo así todos podrán sentarse a la mesa de negociación “de buena fe, y con la confianza de que éste no será un encuentro puramente formal y vacío, sino que se abordarán los temas de fondo que dividen a la sociedad venezolana”.

 

En este sentido se refirió además a los obstáculos “que impiden a muchos participar en este esfuerzo y que deberían superarse de manera previa”.

 

“Para el gobierno no tiene sentido dialogar con quienes le niegan legitimidad y persiguen abiertamente su derrocamiento. Para la oposición, en cambio, es imposible hacerlo mientras algunos de sus dirigentes están detenidos o se les desconocen sus derechos”, apuntó.

 

Consideró que la situación requerirá concesiones de ambas partes, “deponiendo la confrontación, asumiendo sus responsabilidades y buscando juntos una salida que evite que continúen las muertes y la violencia y recoja las esperanzas de un pueblo que anhela la paz”.