WASHINGTON. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, promulgó este viernes el presupuesto correspondiente al ejercicio 2014 por alrededor 1.11 billones de dólares, poniendo así fin a la amenaza de una nueva parálisis del gobierno federal.

 

El presidente firmó la ley que fue aprobada esta semana por las dos cámaras del Congreso, tras tres años de inestabilidad presupuestaria y de disputas partidistas entre demócratas y republicanos.

 

El presupuesto financia al gobierno federal hasta el 30 de septiembre y descarta hasta entonces el riesgo de un nuevo cierre de la administración, como sucediera el pasado octubre durante más de quince días.

 

Obama estimó al respecto que este presupuesto representaba una verdadera ayuda para los estadounidenses que se encuentran en mayor dificultad.

 

“No se trata únicamente de cifras”, precisó. “Se trata de compatriotas sin techo que van a poder tener un alojamiento (…) Se trata de jóvenes científicos que van a poder encontrar una cura contra el cáncer o el Alzheimer”, insistió.

 

El presupuesto aprobado se refiere a los gastos corrientes, que representan alrededor de un tercio de los gastos totales del Estado federal. Valorado en más de 1,012 billones de dólares, el presupuesto contempla 92.000 millones de dólares para operaciones militares en el extranjero, esencialmente la guerra en Afganistán, y 6.500 millones para gastos extraordinarios vinculados a catástrofes naturales.