A pesar de los conflictos al interior de la izquierda por la definición de candidaturas locales, el candidato del Movimiento Progresista a la gubernatura de Tabasco, Arturo Núñez Jiménez, considera que el “efecto Peña Nieto” será insuficiente para que Jesús Alí de la Torre, candidato del PRI, pueda mantener la hegemonía tricolor en dicha entidad.

 

“El hecho de que Enrique Peña Nieto haya venido al inicio de la campaña de Alí es porque quieren apostarle al efecto mediático a ver si ayuda a levantar a Alí, quien no es el mejor candidato que pudieron postular y dejó muy molestos a muchos priistas. Le están dando respiración artificial, políticamente hablando. Yo no la necesito”, expresó Núñez en entrevista telefónica con 24 HORAS.

 

Así lo afirmó tras cuando se le preguntó si la ausencia de Andrés Manuel López Obrador en el arranque de su campaña se debió a problemas de agenda y no al descontento que predomina en el PRD local, luego de que el 9 de mayo pasado, el Tribunal Electoral de Tabasco ordenó repetir el proceso interno para definir 16 candidaturas municipales y 19 a diputados locales debido a las irregularidades registradas en el proceso, que fueron avaladas por el Consejo Electivo del sol azteca.

 

Los problemas para la izquierda comenzaron luego de que el PRD tabasqueño diera a conocer los resultados de las encuestas para seleccionar a sus candidatos, lo cual generó malestar entre diversas corrientes perredistas en municipios como Cárdenas, Nacajuca, Cunduacán, Paraíso y principalmente en Macuspana, tierra natal de López Obrador, donde 600 personas encabezadas por el dirigente Gaspar Díaz, decidieron abandonar las filas del sol azteca para apoyar al PRI.

 

De acuerdo con los inconformes, el problema se originó luego de que Núñez trató de imponer a disidentes priistas en diversas candidaturas, haciendo a un lado a los militantes del PRD. Así ocurrió con la candidatura de Humberto de los Santos Bertruy por el Movimiento Progresista a la alcaldía de Tabasco, Centro, quien es cercano colaborador del ex aspirante priista a la gubernatura, Evaristo Hernández, quien en días recientes se incorporó a la campaña de Alí como coordinador de estrategia política, luego de haber amenazado con renunciar.

 

“Nadie absolutamente puede decir que yo haya impuesto a alguien. Muchos compañeros del PRI vinieron a tocar la puerta y la generosidad del PRD permitió que pudieran inscribirse en igualdad de condiciones para participar en la encuesta, pero que ganaron o no, ya dependía del capital político y el trabajo que traían consigo. Al final de cuentas fueron las encuestas las que ayudaron a decidir”, señaló Núñez tras criticar el oportunismo  de personajes como Hernández y negar tajante las acusaciones en su contra por la imposición de candidatos.

 

“Efectivamente, hubo muchas muestras de inconformidad que afortunadamente la gran mayoría de ellas se han logrado dirimir y procesar a través de los canales del propio partido, el trabajo político de los candidatos y la buena disposición de muchos compañeros”, apuntó.

 

Entre los priistas que actualmente apoyan la candidatura de Núñez se encuentran el ex madracista Ángel Solís Carballo; Jaime Mier y Terán Suárez, ex aspirante a la gubernatura y ex secretario de Salud estatal; Roger Arias García, dirigente del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Educación de Tabasco; Arcadio León Estrada, líder de la Unión Ganadera Regional de Tabasco; los ex dirigentes de la Confederación Nacional Campesina, Francisco Rabelo Cupido y Víctor Manuel López Cruz, entre otros.

 

“Todos los días se están adhiriendo a mi campaña distintos cuadros de la sociedad civil y también muchos priistas, unos abiertamente y otros de manera más cuidadosa por sus intereses, dado que el agente económico más importante en el estado además de Pemex es el gobierno estatal y tienen que cuidar sus ingresos, aunque han expresado que nos darán el voto secreto”, asegura Núñez.

 

Entre los políticos que regresaron al PRI tras la operación cicatriz impulsada por el gobernador tabasqueño, Andrés Granier Melo, se encuentran los ex aspirantes a la alcaldía del Centro, José Manuel Cruz Castellanos y José Eduardo Cuco Rovirosa, la diputada federal Estela de la Fuente Dagdug, el diputado local Óscar Castillo Moha y la ex legisladora local Blanca Estela Pulido, entre otros.

 

Aunque las encuestas más recientes realizadas por Parametría y Mitofsky dan a Alí una ventaja de poco más de 10 puntos porcentuales en las preferencias electorales, Núñez considera que dichas mediciones hay que tomarlas con cautela, ya que mientras Mitofsky auguraba dos semanas antes de la elección presidencial de 2006 que el PRI arrasaría con el “carro completo” los números terminaron por favorecer a la izquierda gracias al efecto López Obrador.