NUEVA YORK. Los teléfonos públicos en las calles de Nueva York se convertirían en cosa del pasado si se concreta un plan anunciado el lunes que contempla reemplazarlos con puntos de acceso de Wi-Fi con capacidad para llamadas a todo el país y capacidad para cargar teléfonos.

 

El alcalde Bill de Blasio dijo que LinkNYC, un plan propuesto por un grupo de compañías que agrupan bajo el nombre de CityBridge, fue seleccionado para reemplazar el viejo sistema de teléfonos públicos. Unos 10 mil dispositivos se colocaran en los cinco distritos de la ciudad a partir del próximo año, si la Comisión de Franquicias y Concesiones aprueba el plan.

 

Esos dispositivos tendrían, además del Wi-Fi, pantallas táctiles para acceso a agencias municipales y pantallas digitales para la colocación de anuncios y publicidad.

 

Los dispositivos reemplazarían unos 8 mil 400 teléfonos públicos en 6 mil 452 puntos de la ciudad. Los únicos teléfonos públicos que quedarían serían tres casetas en la zona del Upper West Side que se conservarían como parte de la historia de la ciudad.

 

De Blasio dijo que el plan no costará nada a los contribuyentes y que el dinero de la implementación del proyecto vendrá de la publicidad. El gobierno municipal indicó que los ingresos por concepto de publicidad llegarían a 500 millones de dólares en los próximos 12 años.

 

De Blasio dijo que el sistema ampliaría el acceso a la banda ancha.

 

Con esta propuesta para la mayor y más rápida red municipal de Wi-Fi del mundo —accesible y gratis para todos los neoyorquinos y visitantes por igual— vamos a dar un paso crítico hacia una ciudad más igualitaria, abierta y conectada”, dijo.

 

CityBridge está conformada por compañías como Qualcomm, Comark, Control Group y Titan. El gobierno municipal dijo que el consorcio se ha comprometido a fabricar los dispositivos en la ciudad y que se espera que el programa LinkNYC genere hasta 150 empleos en manufactura, tecnología y publicidad, así como 650 empleos de apoyo.