El líder nacional de Nueva Alianza, Luis Castro Obregón, dio a conocer que hay pláticas para construir una alianza ganadora con el PRI, rumbo a los comicios del Estado de México, elección que -dijo- será el prólogo del 2018.

 

“Tenemos la expectativa de construir una alianza ganadora que nos lleve a un gobierno de composición, en donde podamos dar respuesta a los ciudadanos del Estado de México”, resaltó en entrevista.

 

El líder aliancista recordó que su partido fue aliado del tricolor en la pasada elección para gobernador de dicha entidad, abanderando a Eruviel Avila, quien cumplió con la plataforma y ofertas acordadas en beneficio de los mexiquenses.

 

Respecto a una posible alianza entre el PRD y PAN para la gubernatura del Estado de México, Castro Obregón aseveró que tiene una dificultad de origen porque son extremos, es antagónica y contradictoria, enfrenta costos entre sus mismos partidarios, y pone en común su lucha por el poder, además de que beneficiaría a Morena.

 

Sobre el resto de las entidades que tendrán elecciones en 2017, detalló que en el caso de Veracruz hasta el momento no hay conversaciones con ningún partido, mientras que en Coahuila ya se suscribió un convenio de coalición que encabezan el PRI y el Partido Verde para la gubernatura.

 

En cuanto a Nayarit, tampoco hay conversaciones aunque si señales de sentarse a dialogar con diferentes fuerzas políticas, resaltó.

 

Ante la posibilidad de que algunos partidos pretendan reeditar las campañas de odio del 2016, Castro Obregón expresó que Nueva Alianza nunca participará en campañas negativas y afirmó que los ciudadanos están cansados de los pleitos entre políticos.

 

Más aún, afirmó que cuando una campaña se basa en lo negativo, lo que genera es el rechazo al político en general, y en el pasado caso de Veracruz, la campaña negativa beneficio a Morena.

 

Al hacer un balance sobre el proceso electoral de 2016, el líder nacional de Nueva Alianza destacó que más del 40 por ciento del listado nominal acudió a las urnas, proceso en el cual su partido tuvo un crecimiento moderado entre el electorado, señaló.

 

Afirmó que el electorado voto por la alternancia en el gobierno, independientemente de quién gobernara, es decir, el PRI no perdió más estados porque no gobernaba más entidades y el PAN y PRD tampoco perdieron más estados porque no los encabezaban.

 

Citó como ejemplo que el tricolor recuperó Sinaloa y Oaxaca, y las excepciones fueron los estados donde se dio una oposición dividida o un gobierno eficaz como Puebla e Hidalgo.