El diplomático mexicano Héctor Vasconcelos, hijo de quien fue secretario de Educación y candidato a la presidencia de la República en 1929, José Vasconcelos, es uno de los máximos responsables en la construcción del propuesta en política internacional de Andrés Manuel López Obrador.

 

El actual secretario de Relaciones Internacionales del Movimiento de Regeneración Nacional afirma que la organización de la estructura política del tabasqueño será clave para obtener el triunfo y confía en que los más de 35 mil mexicanos que votaron desde el extranjero en 2006 jueguen un papel importante para convencer a sus familias para votar por el Movimiento Progresista.

 

¿Cuál será el peso electoral de los mexicanos que viven en Estados Unidos?

 

Yo no diría que hay una afectación directa, porque es poca la gente que vota fuera de México, concretamente en Estados Unidos. En la elección de 2006 me parece que fueron 34 mil personas. Ahora esperamos que sean un poco más pero no es un número muy grande. Sin embargo, por vía indirecta lo que nosotros siempre deseamos es que quienes estén convencidos de esta causa en Estados Unidos puedan influir en sus familias y en su círculo para que acá ejerzan el voto en este sentido.

 

¿Tienen el cálculo de cuánta gente podría ser influenciada por los migrantes?

 

Hasta donde yo sé, no se ha hecho ese cálculo.

 

¿Cómo fue que se decidió sumarse al equipo de López Obrador?

 

En 2006 yo era simplemente un simpatizante y quería aportar mi voto para el licenciado López Obrador pero nada más. Era miembro del consejo consultivo de la Coalición para el Bien de Todos, como se llamaba entonces la alianza de izquierda, pero no tuve participación directa en la campaña. No fue sino a raíz de lo que ocurrió en las elecciones que yo empecé a involucrarme más y más, porque francamente me indignó mucho todo lo que pasó en el proceso de la elección y los acontecimientos del 2 de julio. Me empecé a involucrar más y más a partir del día siguiente de la elección.

 

¿Qué diferencias percibe entre el proceso de 2006 y el actual?

 

No podría decir cómo percibe él las diferencias, salvo algo que dice siempre y nos hace ver a todos, y es que ahora tenemos más organización. No existía algo equivalente a Morena en 2006, cuando teníamos solamente a los partidos políticos. Estamos muy conscientes de que hay una presencia de Morena en cada región del país, claro, en diversos grados. Hay lugares donde la presencia es muy importante y otros donde aún es muy limitada, pero esta organización y tener representantes de Morena en cada casilla es algo nuevo. Por eso tenemos la esperanza de que este año sí será posible, por una parte, sacar a los simpatizantes de López Obrador a votar y por otra parte vigilar que se respete el conteo de votos. Como vamos a tener representantes en todas las casillas ya no será tan fácil que se cometan las mismas irregularidades que se cometieron en 2006, aún si hubiera la intención de hacerlo. Estamos apostándole mucho a la estructura de Morena.

 

¿Qué tan sólida está dicha estructura ante las dudas de tengan los 4 millones de representantes que afirma el candidato?

 

Depende de las regiones, de los estados, de los municipios. Hay regiones donde las cosas parecen muy consolidadas y otras donde no tanto pero se está trabajando todos los días en esa consolidación del movimiento, algo que es crucial para motivar a la gente a votar. Estamos concentrados en eso. Vamos a ver en las próximas semanas qué tan consolidado está y sobre todo en el día de la elección, que es la gran prueba.

 

¿Cómo contrarrestar los recursos con los que cuenta el PRI en el caso de los gobernadores y el PAN a nivel federal?

 

Por supuesto que hay desventaja en esta lucha nuestra. No tenemos los recursos económicos que tienen el PRI y el PAN, además de que, salvo algunas excepciones, tenemos que una buena parte de los comentaristas en radio y televisión son escépticos frente a la posibilidad de López Obrador. En efecto, la nuestra es una lucha a contrapelo y cuesta arriba, pero lo que tenemos como puntos a favor es la necesidad de cambiar las cosas, que haya una percepción generalizada de que si no hay cambios fundamentales en el país vamos a seguir empantanados en esta serie de problemas que vivimos en todos los días. También tenemos la organización de Morena, que si funciona, se podrá contraponer a las otras que existe, pero no es fácil porque el poder del dinero está del otro lado.

 

¿Cuál será la clave para el triunfo electoral el próximo 1 de julio?

 

La clave es que la gente se convenza de que hay una manera de cambiar las cosas, que no necesariamente todo va a seguir en este empantanamiento, sino que hay alguien con una propuesta concreta y específica que implica cambios de fondo. A medida que esta idea se multiplique, ahí estará la clave del éxito. En términos más pragmáticos, es importante la organización que tenemos, que motive a al gente y que sea eficaz. Con ese doble aspecto, la cuestión de fondo y la organización es perfectamente posible encontrar un camino pese a todas las dificultades para ganar la elección y lograr la transformación del país.

 

One reply on ““Nuestra lucha es a contrapelo”: Héctor Vasconcelos”

Comments are closed.