El presidente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), Julio Alfonso Santaella Castell, aseguró que no hubo dolo ni mala fe del Instituto de tratar de modificar la comparabilidad con el Coneval en torno a los criterios de medición de la pobreza.

 

En el marco de una reunión con los diputados y senadores de la Tercera Comisión de la Permanente, explicó que los criterios están diseñados de manera que no se perdiera la comparabilidad, “esta no se perdió por diseño, sino por el resultado que se obtuvo”, señaló.

 

Detalló que se generaron sospechas después de que en el 2015, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) informó que entre 2012 y 2014 el número de mexicanos en pobreza aumentó de 53.3 millones a 55.3 millones de personas; y con los nuevos datos del INEGI este sector incrementó sus ingresos en 33%, sin explicación metodológica creíble.

 

Señaló que los resultados del Módulo mantienen la metodología de los levantamientos previos; sin embargo, se advirtió de sus limitaciones de comparabilidad para prevenir su uso político. El presidente del Inegi asumió la responsabilidad de realizar las revisiones necesarias, a pesar de que se generaron cuando el aún no presidia al Instituto.

 

Santaella Castell detalló que el titular de la Dirección General de Estadísticas Sociodemográficas del Inegi fue quien decidió hacer los cambios en la última medición. Reiteró que no hubo ajustes metodológicos, sino mejoras operativas solamente.

 

Por separado y ante los legisladores de la Comisión que preside la senadora Mariana Gómez del Campo, el Secretario Ejecutivo del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social, Gonzalo Hernández Licona, dijo que ya se trabaja con el Inegi para analizar los cambios a la encuesta 2015 y rescatar la confianza de los ciudadanos.

 

Por su parte, el senador panista, Ernesto Cordero Arroyo, aseguró que la credibilidad de una institución tan importante está en duda, “es evidente que alguien en el Instituto se equivocó y debe asumir las consecuencias, ya que no fue un error menor”.

 

El diputado del PRI, Jericó Abramo Masso, cuestionó por qué se cambió la metodología de medición, y qué efecto habrá en el cálculo histórico de los ingresos de la población.

 

El senador Juan Carlos Romero Hicks, del Grupo Parlamentario del PAN, señaló que no existe evidencia plena de que los ajustes metodológicos se hayan realizado de manera coordinada con el Coneval; y en ese sentido, el principal interés es fortalecer la cooperación entre ambas instituciones.

 

Comentó que algo que pudo haber tenido muy buena intención en un principio, hoy ha sido costoso, inservible y afecta la credibilidad de todas las instituciones, y la atención del tema de la pobreza. El senador deseó que el funcionario crezca en lo ejecutivo y en el oficio político de responsabilidad.

 

tpc