Un juzgado federal negó el amparo a Pemex y Pemex Refinación que condicionaban la venta y distribución de combustible a los propietarios de gasolineras si no contrataban los camiones y personal de la paraestatal para el abasto de hidrocarburos.

 

Petróleos Mexicanos pretendió ampararse en contra de la resolución de la extinta Comisión Federal de Competencia (CFC) que los acusó de realizar prácticas anticompetitivas al imponer dicha condición a los dueños de franquicias de Pemex.

 

Al resolver el juicio de amparo 15/2013, el Juzgado Primero de Distrito en Materia Administrativa Especializado en Competencia Económica, Radiodifusión y Telecomunicaciones, negó la protección a Pemex y ratificó el veredicto de la CFC.

 

La dependencia federal reclamaba, entre otros, la inconstitucionalidad del artículo 36 de la Ley Federal de Competencia Económica, así como la resolución del 20 de agosto del 2013 dictada por la CFC que impuso una sanción económica a Pemex Refinación por 651 millones 606 mil pesos.

 

Y es que durante el juicio Petróleos Mexicanos y Pemex Refinación no acreditaron que la entrega de gasolinas y diésel de las terminales de almacenamiento y reparto a las estaciones de servicio sea una actividad propia del área estratégica de la industria petrolera, por lo que la CFC sí tenía facultades para sancionarlos.

 

Asimismo, el órgano jurisdiccional ratificó que se trata de una imposición porque Pemex es un agente económico con poder sustancial en el mercado para la comercialización al mayoreo de gasolinas y diésel a estaciones de servicio con presencia en toda la República.

 

“…lo que tuvo o puede tener el objeto de desplazar indebidamente e impedir el acceso de otros participantes en el mercado de entrega de gasolinas y diésel de las Terminales de Almacenamiento…, dañando el proceso de competencia y libre concurrencia…”, fundamentó el juez de amparo.

 

En años anteriores diversos propietarios de almacenes y gasolineras presentaron denuncia en contra de Pemex Refinación ante la CFC por la posible comisión de prácticas monopólicas.

 

El 20 de agosto de 2013 la Comisión dictó una resolución en la que consideró acreditado el acto reclamado, por lo que impuso una sanción de 651 millones a Pemex Refinación y un millón 608 mil pesos a Petróleos Mexicanos.

 

Asimismo, determinó que debía suprimirse la práctica anticompetitiva y eliminar la obligación impuesta a los dueños de las franquicias de contratar el servicio de traslado de gasolinas y diésel de las terminales de almacenamiento únicamente con personal y equipo de Pemex Refinación, por lo que ahora pueden hacerlo con sus propios medios, siempre que cumplan con los requisitos legales de seguridad y protección civil.

 

Sin embargo, Pemex promovió el juicio de amparo, el cual tocó conocer al Juzgado Primero de Distrito en Materia Administrativa, quien al final le negó la protección de la justicia y ratificó el veredicto de la CFC.