MIAMI. La Administración Nacional para la Aeronáutica y el Espacio (NASA) abrió una investigación sobre la explosión de un cohete comercial no tripulado, ocurrida unos segundos después de despegar de una base en la Isla Wallops, en Virginia.

 

La explosión del cohete Antares, que se dirigía a la Estación Espacial Internacional (EEI), se registró el martes a las 18:22 horas locales (22:22 GMT), seis segundos después de despegar.

 

La investigación será encabezada por la compañía privada Orbital Sciences Corp., constructora del cohete Antares que estalló, y la Administración Federal de Aviación (FAA), informaron las autoridades.

 

“Vamos a averiguar qué fue lo que falló, lo arreglaremos y vamos a aprender de ello”, dijo Bill Gersteinmaier, administrador de Exploración Humana y Operaciones de la NASA, en una teleconferencia emitida por la página web de la agencia espacial.

 

“Vamos a continuar al siguiente intento una vez que entendamos plenamente este percance. La tripulación de la Estación Espacial Internacional (EEI) no está en peligro de quedarse sin alimentos u otros suministros esenciales”, señaló.

 

Nadie resultó herido durante la explosión del cohete, de acuerdo con la NASA y Orbital.

 

Una nave de carga Cygnus en la cima del cohete llevaba dos mil 267 kilogramos de equipo para las seis personas que viven en la EEI. Se trataba de la cuarta nave Cygnus con destino a la estación, la primera fue enviada poco más de un año.

 

“No vamos a volar otro cohetes Antares hasta que entendamos la causa de la falla y las medidas correctivas necesarias para garantizar que esto no vuelva a suceder”, dijo Frank Culbertson, vicepresidente ejecutivo Orbital Sciences Corp.

 

“Es demasiado pronto para decir cuánto tiempo podría tomar. Vamos a ir a través de los procesos adecuados. Vamos a hacerlo profesionalmente y completamente (…) Pero les puedo asegurar que vamos a averiguar lo que salió mal. Vamos a corregirlo y vamos a volar de nuevo”, subrayó.

 

La NASA le paga a Orbital Sciences Corp. y a otra empresa SpaceX, con sede en California, para mantener abastecida a la EEI en la etapa posterior a los transbordadores.

 

Desde que inició el programa de estas empresas todas las misiones habían sido exitosas y seguramente esta falla levantará las críticas al gobierno, pues el presidente estadunidense Barack Obama ha sido un defensor del programa de vuelos espaciales comerciales.

 

Pese a que el cohete no llevaba tripulantes, su estallido en medio de la noche hizo recordar a los estadunidenses el horror de otras misiones fallidas que lamentablemente si han sido tripuladas.

 

El transbordador espacial Challenger se desintegró en 1986 a 73 segundos de su despegue y el del Columbia en 2003 al reingresar a la Tierra.  DM