TUCSON. El número de inmigrantes que mueren tratando de cruzar la frontera entre Estados Unidos y México ha caído a su nivel más bajo en 15 años, de acuerdo con datos del gobierno.

 

Eso se debe a que más centroamericanos se están entregando a las autoridades en Texas y menos están arriesgando sus vidas en la peligrosa travesía por los desiertos de Arizona.

 

El gobierno de Estados Unidos registró 307 muertes en el año fiscal del 2014, que concluyó en septiembre, la cifra más baja desde 1999. En el 2013, el total fue de 445.

 

Los números, obtenidos por la agencia The Associated Press, marcan la primera vez en que Arizona no ha sido el lugar más mortífero para cruzar la frontera. El sector de Tucson registró 107 muertes, comparadas con 115 en el sector del Valle del Río Grande, en Texas.

 

AH