El fabricante nipón de vehículos Mitsubishi Motors reconoció hoy haber falseado datos sobre eficiencia energética de sus minivehículos, en un caso que afecta a unos 625,000 automóviles de este tipo vendidos en Japón.

 

Mitsubishi manipuló el proceso de prueba de consumo de combustible de forma que los resultados de los test reflejaron unos datos de eficiencia energética mejores que los reales, explicó hoy el presidente de la compañía, Tetsuro Aikawa, en una rueda de prensa en Tokio.

 

El falseado de las pruebas tuvo lugar mediante una modificación del presión del aire aplicada a los neumáticos, lo que repercutió en los datos sobre consumo de combustible proporcionados por la empresa a las autoridades niponas sobre cuatro modelos de minivehículos (con motores inferiores a los 660 centímetros cúbicos) comercializados en Japón.

 

La manipulación afecta a unas 157,000 unidades de los modelos ek Wagon y ek Space producidos por Mitsubishi desde 2013, y a otras 468,000 unidades del Dayz y el Dayz Roox, ambos producidos de forma conjunta por esta compañía y comercializados por Nissan Motor.

 

Mitsubishi halló los datos eran erróneos tras llevar a cabo una investigación interna, cuyos resultados han sido trasladados a las autoridades niponas, anunció el presidente en la rueda de prensa celebrada en la sede del Ministerio de Transporte, Infraestructura y Turismo.

 

“Seguiremos investigando qué ha pasado y quiénes son los responsables”, señaló Aikawa, quien también anunció que la compañía ha encargado la formación de una comisión de investigación independiente.

 

El responsable de Mitsubishi añadió que la compañía ha decidido detener la producción y comercialización de todos los modelos citados y pidió “sinceras disculpas” a los consumidores afectados, para los cuales la empresa estudia ofrecer compensaciones.

 

Asimismo, afirmó que “teniendo en cuenta la gravedad del caso”, la empresa va a revisar los datos sobre consumo energético de otros modelos exportados al extranjero, cuyos procesos de prueba varían según cada legislación nacional.

 

El fabricante nipón se desplomó hoy más de un 15 por ciento en la Bolsa de Tokio tras anunciar su convocatoria de prensa sobre irregularidades en sus controles de emisiones contaminantes, lo que supone su mayor caída desde julio de 2014.

 

Los modelos de minivehículos son muy populares en el mercado japonés gracias a sus bajos costes de mantenimiento, su gasto de combustible más eficiente o su tamaño reducido.