La secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) lamentó el rechazo del gobernador de Texas, Rick Perry, a la posición de México sobre el envío de la Guardia Nacional de Estados Unidos para resguardar la frontera.

 

“La cancillería lamenta los comentarios que se vierten en este comunicado; no están sustentados en la realidad de las cifras que hemos visto”.

 

El tema migratorio no es un asunto como se ha dicho de seguridad nacional, sino humanitario, dijo en conferencia de prensa, Sergio Alcocer, subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores.

 

El presidente Enrique Peña Nieto manifestó la semana pasada su rechazo a esta medida al calificar de innecesario el despliegue de fuerzas armadas como una solución al problema migratorio.

 

Perry reiteró este miércoles en una carta su decisión de “proteger” a su ciudadanía del continuo flujo de migrantes mexicanos y centroamericanos en Texas, y además invitó al Peña a visitar ese estado para observar el “profesionalismo con el que se conduce la Guardia Nacional”.

 

 

El funcionario indicó que las acciones para controlar el flujo migratorio deben darse en conjunto entre ambos gobiernos. Agregó que mantiene un diálogo permanente con el gobierno federal de Estados Unidos, como lo es la Declaración de la Frontera Siglo XXI que establece administrar de manera conjunta el tema fronterizo, tanto en materia migratoria, como en lo económico.

 

“Mantendremos una postura muy firme en el sentido que este no es un tema de seguridad o porosidad en la frontera, es un tema de carácter humanitario por la presencia de menores migrantes no acompañados, y que tienen que ser tratados en conformidad con el marco legal estadunidense”, agregó Alcocer. NS