Si han navegado recientemente en Twitter, seguro ha notado que algunos de sus seguidores tuitean sobre una nueva aplicación que para los mayores de 25 años es totalmente desconocida. Se llama Meerkat, y a pesar de que su logo es una suricata con fondo amarillo, no se trata de una app con fotos de animales.

 

Es una aplicación que brinda el servicio de video en streaming con tan sólo un smartphone. En tan sólo dos semanas de vida (debutó el 27 de febrero) ha enamorado a más de 120 mil usuarios, pero ya se ha ganado un poderoso enemigo: la red de los 140 caracteres que empieza a ponerle obstáculos.

 

¿Cómo funciona?

 

Lo que ocurría antes es que cuando alguien asistía un evento y quería compartirlo en directo, tenía que publicar el video a través de una aplicación ajena a Twitter. Pero ahora Meerkat permite a cada tuitero ser una especie de operador de cámara que transmite en vivo.

 

Para operar la app, es así de simple. Hay que descargarla, loguearse con la cuenta de Twitter, titular lo que se quiere compartir y oprimir “stream”. Entonces se publicará un tuit con la retransmisión. Cuando la emisión termina desaparece de la red, aunque hay la opción de guardarla en el dispositivo del usuario.

 

Twitter no está contento

 

Hasta hace unos días, al registrarse en Meerkat, la app accedía a la lista de followers del usuario en Twitter. Así, cada vez que alguien a quien seguía empezaba un streaming, Meerkat le enviaba una notificación. Pero el sábado, Twitter bloqueó este acceso.

 

Un portavoz de la red social señaló que es una medida “coherente” con la “política interna” de la firma.

 

El fundador de Meerkat, Ben Rubin, se limitó a decir en su cuenta en la red social que “la decisión de Twitter muestra la importancia que ha ganado Meerkat. […] Éste es sólo el comienzo. La revolución será transmitida en vivo”.