Uno de los principales símbolos con los que se identifica una competencia deportiva internacional es mediante el empleo de una mascota. Ésta, usualmente, es la representación de un animal o figura emblemática de la zona en la que se desarrolla.

 

Además de mostrar un aspecto amigable y divertido, tanto de la sede y justa deportiva, las mascotas son uno de los medios más redituables para el comité organizador, ya que incluye venta de licencias y productos en torno a los Juegos.

 

La variedad de diseños, formas y colores representan el ingenio y expresión cultural del país encargado de albergar la competencia, además de siempre estar relacionados con características importantes en el ámbito deportivo: fuerza, destreza, dinamismo, ímpetu y perseverancia.

 

La primera aparición oficial de las mascotas en una justa deportiva fue en los Juegos Olímpicos de Múnich 1972, hasta convertirse en un elemento usual de cada edición. Al igual que los Mundiales de futbol y los Olímpicos, se decidió que los Juegos Centroamericanos y del Caribe, además de carteles oficiales, contarían con una animación atractiva y alegre.

 

Medellín 1978, el águila como emblema

 

Si bien, en la edición XIII de los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Medellín, Colombia en 1978, el águila utilizada en los carteles no fue considerada una mascota, sí fue la primera ocasión en la que un animal representó la justa regional.

 

La imagen consistía en la cabeza de un ave, cuyo cuerpo estaba compuesto por tres aros entrelazados en los colores amarillo, azul y rojo, emblemas de la competencia regional.

 

La Habana 1982, cocodrilo “Cuco”

 

La imagen de un pequeño cocodrilo con una boina en color rojo ilustró los Juegos Centroamericanos y del Caribe en su edición XIV, celebrada en La Habana, Cuba en 1982. El simpático animal acompañó todos los carteles e imágenes que anunciaron la competencia.

 

La elección de “Cuco” se debió a un concurso en el que se pidió crear una ilustración con la que se identificara fácilmente a los Juegos.

 

Maracaibo 1998, resalta las etnias

 

Los Juegos Centroamericanos y del Caribe celebrados en Maracaibo, Venezuela en 1998 no contaron con la imagen de un animal. Para esta edición, el comité organizador optó por la animación de un niño nativo con el fuego centroamericano en las manos.

 

La imagen mostraba la cultura de Maracaibo a través de sus etnias.

 

San Salvador 2002, “Chica”, “Chepe” y “Chamba”

 

Para el comité organizador de los Juegos celebrados en El Salvador en 2002, un perico, un mapache y un águila fueron la mejor manera de engrandecer la identidad de la región. “Chica” era una periquita representaba a la mujer del nuevo siglo y su deseo de volar.

 

“Chepe”, el mapache, refería a la fauna del país, así como su agilidad como cazador. Mientras que “Chamba” era un águila que simbolizaba el triunfo, la libertad y esperanza de los atletas, por ser el ave más poderosa y privilegiada del mundo.

 

Cartagena de Indias 2006, “Cata” y “Dany”

 

La edición XX de los Juegos Centroamericanos cuya sede fue en Cartagena de Indias, Colombia en 2006 fue ilustrada por la típica ave centroamericana, alcatraz, y una joven india que simbolizaba la participación, cada vez mayor, de la mujer y las mezclas étnicas de la ciudad sede.

 

La vestimenta de “Cata” era una mezcla de prendas típicas (penacho y plumas) con ropa deportiva, alusiva a los Juegos. Y “Dany” aludía al vuelo del ave y su estancia en aire, tierra y agua, actitud que reflejaban los clavadistas en competencia.

 

Mayagüez 2010, “Mayi” y “Magüe”

 

La participación de las mujeres en los Juegos Centroamericanos y del Caribe requirió que también fueran simbolizadas en forma de mascota o ilustración, y Mayagüez, Puerto Rico no fue la excepción.

 

Para estos Juegos se optó por dos animaciones del fuego centroamericano, en masculino y femenino, “Mayi” y “Magüe. Su propósito fue garantizar la armonía de los juegos y la imagen alegre de la ciudad.

 

Veracruz 2014, “Toto” y “Bamba”

 

Para la próxima edición de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, en Veracruz a celebrarse del 14 al 30 de noviembre de este año, “Bamba” y “Toto” serán las mascotas que representen la cultura y valor de la región mesoamericana.

 

“Toto” representa a las denominadas “caritas sonrientes”, símbolos de la alfarería veracruzana. Es parte de la cultura Totoneca y su indumentaria es un tocado en la cabeza con una rama de vainilla, además de la antorcha con el fuego centroamericano.

 

Mientras que “Bamba” es una iguana, la cual busca simbolizar a las mujeres atletas en competencia. Algunas de sus características principales son su entusiasmo y alegría.