Jorge Alegría, director adjunto de la Bolsa Mexicana de Valores, (BMV), aseguró que no hay preocupación ni alarma por la pérdida de valor de capitalización de las acciones de 612 mil millones de pesos registrada en los primeros meses de 2014.

 

“El número que desciende representa aproximadamente 10%, y no implican que hayan salido inversionistas extranjeros de la Bolsa”, manifestó.

 

“Los 600 mil millones de pesos no son una salida de recursos (fuga de capitales), sino un ajuste en el precio”, aseguró Alegría en el marco de la colocación simbólica del SMARTRC de Actinver.

 

“No es preocupante (…) es un tema de precios no de flujos”, agregó el representante del mercado de valores mexicano.

 

Recordó que la baja en los precios de las acciones fue producto de la volatilidad de los mercados mundiales, en particular de los emergentes aunado a la depreciación del peso.

 

“La Bolsa, al igual que los mercados emergentes, desde 2013 tuvieron una corrección y una caída en el precio de las acciones por factores relaciones a la política monetaria de Estados Unidos y preocupaciones globales sobre los mercados emergentes”, señaló el director adjunto.

 

Alegría manifestó que los problemas generados en el mercado estadounidense y en los emergentes afectaron a la economía, así como a los precios de los índices del mercado bursátil.

 

“En el rubro de inversión extranjera en renta no se observó una caída significativa, incluso observa un alza en los bonos emitidos por el gobierno federal”, precisó.

 

Los riesgos

 

El viernes 4 de abril de 2014, el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, advirtió a los banqueros del país sobre el riesgo de una salida masiva de capitales foráneos de las economías emergentes ante la vulnerabilidad de estos países y el riesgo de los cambios abruptos en las políticas monetarias de países avanzados, en particular de Estados Unidos.

 

El reto es hallar la forma de estimular el crecimiento económico, “sin comprometer la estabilidad financiera en un entorno externo plagado de incertidumbre”, explicó.

 

Una posibilidad, dijo el banquero central, es invocar a la comunidad internacional, tratando de elaborar un paquete donde colaborarían tanto países emergentes como avanzados. Esto, aseguró, se ha intentado en el Grupo de los 20.

 

“Pero yo soy escéptico sobre este tipo de soluciones. Hoy los países avanzados se encuentran en una tesitura más complicada que los países emergentes”, dijo Carstens.

 

“Si el tipo de cambio es mayor y los precios bajaron evidentemente el resultado será sustancialmente menor. Si el tipo de cambio baja y los precios de la Bolsa suben; el saldo crecerá”, expresó Roberto Valdés Acrá, socio fundador y director general de Grupo Financiero Actinver.

 

Hay variables externas a nivel global por las condiciones climatológicas que le pegaron al mercado estadunidense y se vino una disminución de su ritmo de crecimiento y eso impacto a todos, comentó el directivo de la institución bancaria.

 

Valdés Acrá declaró que los niveles récord de las reservas internacionales de este año dan optimismo, porque México como país emergente está realizando una tarea para mejorar los marcos regulatorios.

 

“Los planes de ofertas públicas siguen ahí, evidentemente tuvimos un arranque que en términos de precios provocó un ajuste a los precios de las acciones en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), y eso hizo que se dificultará las ofertas públicas para primer trimestre incluyendo aumentos de capital”, manifestó Alegría.

 

Agregó que en las dos o tres últimas semanas se ha dado una recuperación importante en los precios del Índice de Precios y Cotizaciones (IPC).

 

“La recuperación ha sido acompañada de una muy buena actividad y ha sido mucho el volumen y la recuperación se está dando con volumen operado y eso nos permite ver que las colocaciones para el primer trimestre se reactiven en las siguientes semanas o meses”, agregó Jorge Alegría.

 

Revés bursátil

 

El mal desempeño de las acciones del sector tecnológico en Estados Unidos y la decepción de los inversionistas ante el retraso en el debate y aprobación de las leyes secundarias de la reforma energética golpearon a la Bolsa Mexicana de Valores, la cual cerró ayer jueves con una pérdida de 1.20%.

 

En Estados Unidos los mercados accionarios cerraron con pérdidas, ante el desempeño de las acciones del sector tecnológico, señaló Grupo Financiero Invex.

 

“Los inversionistas reanudaron la toma de utilidades, ante preocupaciones de que las valuaciones dentro del citado sector son demasiado altas”, explicó en un el banco en un reporte.

 

Líderes legislativos del PRI afirmaron que es muy probable que la propuesta de leyes secundarias de energía deba ser debatida en un periodo extraordinario de sesiones y no en el periodo regular que termina el 30 de abril.

 

Por su parte, Gabriela Siller, directora de análisis económico-financiero de Banco Base, dijo que los inversionistas también se mostraron poco optimistas tras la publicación de las cifras de comercio exterior de China, con una inesperada contracción anual de 6.6% en las exportaciones de marzo, elevando el nerviosismo por la estabilidad económica de dicho país en los próximos meses.

 

El Nasdaq Composite Index tuvo su mayor caída desde el 2011, al cerrar con una pérdida de 3.10% para quedar en los cuatro mil 054 unidades.

 

Por su parte, el Dow Jones cayó 1.62% a 16 mil 170 unidades, mientras que el índice S&P 500 cayó 2.09% mil 833.09 unidades.

 

Los movimientos implicaron un fuerte revés respecto al día anterior, cuando las acciones repuntaron tras las minutas de la última reunión de la Reserva Federal, que mostraron que sus funcionarios son más propensos a mantener bajas las tasas de interés.

 

Entre las acciones relacionadas con internet como Facebook Inc cayeron 5.2% y cerraron a 59.16 dólares, mientras que las de Netflix Inc perdieron 5.18% a 334.73 dólares.