El presidente de Argentina, Mauricio Macri, prometió hoy que se continuará con la búsqueda del submarino de la Armada que se perdió con 44 tripulantes a bordo, y advirtió que no es el momento de señalar culpables”.

 

“Mi primer pedido es que transcurramos este momento con el máximo de los respetos por el dolor que esto ha generado, estoy acá para garantizarles que vamos a continuar con la búsqueda”, afirmó el presidente en una repentina rueda de prensa.

 

Sin que estuviera previsto en su agenda, Macri acudió este viernes a la sede de la Armada para conocer los pormenores del operativo de búsqueda del submarino en el que participan más de cuatro mil personas de 13 países.

 

Luego, el presidente ofreció una repentina rueda de prensa mientras se incrementaban reclamos ciudadanos por el silencio que ha mantenido en torno a esta tragedia.

 

“La desaparición y actual búsqueda del submarino nos conmovió a todos los argentinos. Les garantizo que vamos a continuar con la búsqueda, especialmente ahora que contamos con el apoyo internacional y con tecnología de avanzada”, dijo.

 

Macri advirtió que “hasta que no tengamos la información completa no tenemos que aventurarnos a buscar culpables” y garantizó que su compromiso “es con la verdad, vamos a saber la verdad con el tiempo a partir de esta investigación”.

 

También aseguró que “queremos entender cómo un submarino al que le habían realizado la revisión de media vida y estaba en perfectas condiciones para navegar, sufrió esta supuesta explosión”.

 

Además hizo un reconocimiento a los 44 marinos perdidos y se solidarizó con sus familiares, a quienes envió “mi mayor afecto, el dolor es mucho pero estamos juntos y vamos a recorrer este camino hasta el final”.

 

El submarino de la Armada Argentina ARA San Juan es buscado en la zona del golfo San Jorge, en la provincia de Chubut, a casi mil 400 kilómetros de esta capital, ya que fue su última posición reportada el pasado 15 de noviembre.

 

La nave había comenzado su recorrido en Ushuaia, ubicada en el extremo sur de la Patagonia, y tenía que haber llegado el lunes a Mar del Plata, una ciudad de la costa atlántica, a una distancia de sólo 413 kilómetros de Buenos Aires.

 

Hace nueve días, el submarino dejó de comunicarse, lo que marcó el inicio de un operativo inédito de búsqueda en el que participan equipos de una docena de países, entre ellos Estados Unidos, Brasil, Gran Bretaña, Canadá, Colombia, España y Rusia.

 

La víspera, la Armada confirmó que el pasado 15 de agosto, tres horas después del último contacto que el submarino tuvo con la base naval, se registró una explosión en la zona.

 

Sin embargo, las autoridades todavía no pueden confirmar que el buque estalló y tampoco puede dar un parte de los 44 marinos perdidos.

 

AFH