A todos nos ha sorprendido ver cómo los 15 años de Rubí se han convertido en un suceso. La nota ha viajado a la velocidad de las redes sociales, donde lo efímero es lo que nos entretiene. No es falta de noticias, es reflejo de lo que estamos viviendo en estos tiempos, donde a algunos les cuesta trabajo acostumbrarse; pero la comunicación a través de las redes es distinta.

 

Hasta los más destacados periodistas abordaron el tema, y Denise Maerker enlazó al presidente municipal de Valle de Guadalupe para preguntarle qué medidas de seguridad tomarán ante la inminente llegada de miles de personas el próximo 26 de diciembre. La gente se ríe, pero eso es lo que estamos viviendo. Sabemos quién es Rubí y desconocemos la historia de nuestro país…

 

En ese mismo tema, nadie puede creer que #LadyWuuu se haya hecho famoso por hacer esa exclamación en medio de un concierto. Una señora me comentaba: “Yo llevo ahorrando dos años para poder comprar un coche usado y al Wuuu ya le regalaron uno”. Una marca de autos le pidió un millón de likes, y al conseguirlo le obsequiaron un vehículo sin hacer el menor esfuerzo.

 

Son tiempos de cambio. A los que vivimos otras circunstancias nos es difícil comprenderlo, pero los videos virales son lo de hoy.

 

Desde los Vázquez Sound, pasando por Mario Bautista y la Yuya se ganan la vida gracias a la fama que obtuvieron a través de la red. ¿Cuánto tiempo estarán vigentes? Depende de ellos, pero saltar a los escenarios repentinamente les ayuda mucho y se ahorran años de picar piedra para darse a conocer.

 

Por ejemplo, Polo Morín tuvo que grabar un video para subirlo a su Face y explicar que él es libre para amar. El actor subió unas fotografías de un viaje que realizó por Europa junto a Lambda García, alguien las sacó de ahí y las publicó. Polo asegura que no tiene por qué dar explicaciones acerca de su vida privada; sin embargo, se vio forzado a decir que es feliz, que no niega quién es, ni lo que le gusta y aunque le pregunten si es gay, él siempre dirá que no, pues su corazón está enamorado y en paz.

 

En pocas palabras lo aceptó, aunque no quiso ponerle etiquetas. Y todo porque antes no subíamos fotografías de todo lo que hacíamos. En la actualidad nos gusta documentar o presumir con fotos nuestro paso por la vida. Algunos aún se rehúsan a compartir sus momentos, pero poco a poco vamos cayendo. Es imposible resistirse a la modernidad.
Incluso los papás les recomiendan a sus hijos tener precaución de lo que suben a su Face, Twitter, Snapchat o Vine, pero los jóvenes así se conocen, simplemente es su forma de comunicarse.

 

Hay más…, pero hasta ahí les cuento.