Fue en 1923 que surgió la inspiración para nombrar a un equipo de futbol, así nació el Necaxa, en honor a un río ubicado en el estado de Puebla.

 

En ese mismo año, el reglamento de la Federación Mexicana de Futbol prohibió que los equipos afiliados a la liga llevaran nombres de organismos de gobierno o de empresas privadas; entonces su fundador W.H. Frasser junto con trabajadores de la compañía se dieron a la tarea de buscar un nombre que se identificara con el sector en el que se desarrollaban y fue así como decidieron utilizar el de la presa que generaba la luz que iluminaba a la capital del país.


Actualmente, los Rayos han dejado atrás su último paso por la Liga de Ascenso y durante su 94 aniversario buscarán regresar a competir por estar en los primeros planos del futbol mexicano.

 

La afición del Necaxa no vive la emoción de un título desde 1998 cuando vencieron en la final a las Chivas del Guadalajara para obtener su tercer campeonato y consolidarse como el equipo de la década.